Se torna muy complicado escribir sobre un hecho tan grave como el de la aerolínea fantasma AEROCHACO, hoy VUELOS EXPRESO, cuando de acuerdo a la investigación un medio de comunicación se ve involucrado de una forma por demás extraña. En otras palabras, hay quienes involucraron al diario El País, un medio colega reconocido que no entendemos porqué se encuentra en esta situación, vinculado a una irregular línea aérea que en realidad nunca fue ni es tal.
El que haya quien conteste uno de los números de celular que figura en la propaganda de AEROCHACO y diga que se pueden comprar pasajes o se los vende en el diario El País, llama poderosamente la atención… por la actividad de una empresa así, que no tiene nada que ver con aviones ni nada por el estilo. Que el propio Comandante de la IV Brigada Aérea, Sergio Lora, mencione que se «alquila» los aviones de la Fuerza Aérea a una persona física bajo la figura de Editorial «Luis de Fuentes» que es la que imprime este matutino y que de repente se constituye en la que también alquila a los militares aviones públicos y los hace pasar como aviones privados al servicio de pasajeros civiles… difícil de entender, ¿ no es así? Que hayan funcionarias del Tribunal Electoral Departamental posando en fotos con el avión de la Fuerza Aérea detrás de ellas en un vuelo aparentemente contratado a AEROCHACO o usado bajo cualquier otra figura, es muy serio porque se ve que la influencia y llegada de esta seudo aerolínea fue más allá del simple ciudadano incauto que se deja llevar por la publicidad y se sube a un avión sin garantías de nada.
Es inaudito que cualquier persona pueda anunciar que tiene una línea aérea, que publicita sus servicios, que vende pasajes, que transporta pasajeros que suben y bajan en instalaciones militares, sin control alguno, que usa aviones de la Fuerza Aérea como si fueran de una empresa privada y… no haya quien controle nada, es decir, no existe ni el más mínimo control de lo que pasa en tierra y también en el aire, por lo menos en Tarija. Así de fácil resulta poner una línea aérea sin tener «un sólo papel» que lo acredite, que vuele libremente como si de un simple taxi se tratara y que sobretodo le dé a los usuarios las mínimas garantías de seguridad. Es extraño que un diario como El País esté en medio de este escándalo, que lo hayan puesto en medio de algo repleto de irregularidades, es difícil encontrar como se liga la edición de un matutino con la operación de una línea aérea por más «trucha» que esta sea, pero alguien lo hizo, pensó que si se podía y hasta dejaron que crea que si se podía, la pregunta es por qué dejaron?, ¿ qué movió a los militares a ceder tan fácilmente sus aviones?, ¿ que influyó tanto para que no les llame la atención que «alguien les alquile» TODOS LOS DÍAS sus aviones que partían llenos de civiles de Tarija a Yacuiba y viceversa?, ¿ algo muy fuerte y seductor debió cruzarse en el camino como para seducir a tantos uniformados?. Muchas preguntas y pocas respuestas, por lo menos de parte de quien tiene que darlas.