Redacción central Bolinfo/ Tarija
(elPeriódico, abril 09/2019) El Gerente Nacional de Fiscalización de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Bernardo Urquidi, desde Villa Montes, informó que la estatal petrolera realizó un estudio de laboratorio el año 2018 para determinar las características de las aguas del río Guadalquivir del departamento de Tarija. El estudio revela que las aguas de este río, que en su trayecto cambia de nombre a río Tarija y llegan hasta el corazón del parque de Tariquía, no son aptas para el riego, peor para el consumo humano.
“El estudio realizado en los principales cuerpos de agua de Tarija, que van desde el río Guadalquivir (altura de Canasmoro) hasta llegar al río Grande de Tarija (altura de San Telmo), en el que ambos ríos son de clasificación Clase “C”, es decir no son aptos para su uso como abastecimiento de agua potable ni para riego de hortalizas”», sostiene Urquidi.
“Su uso se restringe sólo para el abastecimiento industrial, esto demuestra que la contaminación existe sin que se haya desarrollado ninguna actividad hidrocarburífera; estos resultados se conocieron en la evaluación del impacto ambiental del proyecto, por lo que también se va desarrollar un plan de mitigación” detalla.
El gerente lamentó que “intereses políticos, no ecologistas” pretendan generar una psicosis colectiva entre comunarios y población en general, con información falsa y distorsionada sobre los proyectos exploratorios San Telmo Norte y Astillero, demostrando su sesgada visión sobre la protección del medio ambiente, que omite “la extrema gravedad que implica el consumo humano de aguas insalubres, las mismas que llegan hasta el corazón de la reserva de Tariquía”.
“De acuerdo al estudio, la contaminación en el río Guadalquivir es resultado de las diferentes actividades a lo largo de estos cuerpos de agua tan importantes para la vida de Tarija que han provocado niveles elevadísimos de contaminación con desechos que van desde aguas residuales, industriales; contaminación por agroquímicos, sedimentos arrastrados debido a los constantes desmontes y chaqueos, incendios en las cabeceras de la Cuenca”, finaliza el gerente de YPFB.