SAÚL CARDOZO/ BOLINFO/ TARIJA
(elPeriódico-octubre 30/2017) Cuentan los ex estudiantes, que hace “mucho tiempo” en el colegio José Manuel Belgrano de la ciudad de Tarija, una figura apareció, cuando aún no existía el colegio en la zona de Fátima, y la misma aparecía siempre a las 23:00, subiendo y bajando sin destino en las aguas de una especie de piscina, a quienes se les aparecía, le llamaba “María Pila”.
Elmer, un antiguo estudiante del colegio contó que al ingresar a la unidad educativa esa historia siempre estaba entre ellos.
“Quién no conoce la historia de María Pila, aparentemente para muchos es una sirena que aparecía en las noches y cuando los hombres iban a cargar agua a sus baldes, se los metía hacia adentro, de ahí nunca más volvían”, relató.
“Es una historia que puede ser real”, contó.
Decían que era un alma de una mujer que había fallecido en el lugar, cuando llorando llegó a sacar agua y de repente, se desmayó, cayendo al fondo de sus aguas, de ahí nunca más apareció.
Cuentan vecinos del barrio Fátima que María Pila, se convirtió en una sirena, porque era una mujer maltratada por su pareja y cuando fue a recoger agua de la pila, se ahogó y ahí se quedó.
“Cada uno tiene su propia historia; sin embargo, todos llegan a lo mismo, de que era una sirena que se metía a los hombres que iban borrachos a recoger el agua, a quienes los hundía, algunos salían y podían contar, pero otros no”, mencionó, Franz, un estudiante del colegio.
Desde ese día por las noches en el sector, algo se lamentaba como una calavera con cuerpo de una mujer que gritaba su queja justo cerca de la medianoche, retumbándose con sonidos lúgubre.
Tenía una aparición sobrenatural que a los mismos vecinos del barrio les hacía helar la sangre, por lo que al escuchar y sentir esa presencia retornaban presurosos a sus casas haciéndose la señal de la cruz.
“Cada alumno cuenta la leyenda a sus amigos, a sus hijos y a sus esposas, es una historia que nunca acabará porque es única en Tarija”, refirió Franz.
Historias verdaderas
La historia de María Pila, fue un mito; sin embargo, la loza donde aparentemente vivía fue desapareciendo poco a poco, pues en las últimas épocas, esa zona del colegio Belgrano la utilizaban los estudiantes como un canchón.
“Servía para pelear, era como un ring de boxeo, cuando alguien te agredía o se te paraba en el colegio, el encuentro era en María Pila, cuántos no dejaron su sangre ahí, cuántos no levantaron los brazos victoriosos por haber ganado una pelea”, añadió un estudiante, quien no quiso dar su nombre, pero si su apodo, “El Pillo”.
La historia
La historia de Tarija y Argentina están estrechamente ligadas. Uno de los cientos de vínculos que todavía hoy quedan visibles en Tarija, es el colegio Belgrano, una de las escuelas de mayor renombre y con mayor capacidad, cuya construcción fue fruto del deseo del célebre prócer argentino Manuel Belgrano.
Manuel Belgrano fue uno de los personajes más trascendentes en la construcción de la nación Argentina. Además de sus logros castrenses en la revolución de mayo de 1811 y en otras conocidas batallas como la de Jujuy o Salta se le atribuye la creación de la bandera argentina en 1812.
Una de sus inquietudes fue el fomento de la educación entre los más jóvenes, un deseo que materializó donando 40.000 pesos oro a la creación de cuatro escuelas públicas ubicadas en Tarija, Jujuy, Tucumán y Santiago del Estero, según recoge en sus trabajos el historiador argentino, Felipe Pigna.
EL APUNTE
El colegio Belgrano el más grande en infraestructura
“Es el colegio más grande. Dentro de sus infraestructuras funcionan siete establecimientos, siendo catalogado así por la capacidad del alumnado. Todos los años tenemos mucho requerimiento”, asegura el entrevistado.
En su fundación se empezó con el turno de la mañana con tres cursos en el nivel inicial y seis primarios y doce secundarios.
Actualmente funciona con todos los ciclos y niveles en la mañana y en la tarde como en la noche con 18 cursos por nivel primario 18 cursos de nivel secundario más 6 cursos del nivel inicial.