No será por mucho tiempo la circunstancia adversa porque la que hoy te inquieta. Los sueños son las semillas de las realidades porque al nacer una idea te llevará hacia una investigación donde harás pruebas inmediatas y unirás tal situación con otra. Se ira formando un ideal con pasión para alcanzarlo. Todo lo anterior se simboliza como una semilla que contiene información, color, textura y comportamiento; solo falta sembrarla en tierra firme para regarla. Tendrás el sumo cuidado de la cantidad de agua para no ahogarla, de agregarle su abono para robustecerla, estarás pendiente de la hierba mala que se irá acercando para interrumpirla o crecer junto con ella.
Tal situación simbólica es lo mismo en nuestra vida, pues cuando creemos que todo irá bien, algo ajeno se presenta y paraliza; pero no te preocupes demasiado, pues todas las cosas nos ayudan a bien, Romanos 8.28. Los tropiezos tienen oculta su enseñanza, pasamos por momentos en donde verdaderamente nos sentimos abatidos, desilusionados y frustrados; todas estas emociones son normales dentro de la semilla humana, lo interesante aquí es poder aceptar que lo exterior ha invadido el interior de mi Ser. Cuando yo me creía ser fuerte, coloqué toda mi atención en preocupación en vez de ocupación por solucionar. Y de esta forma podemos observar que el problema en realidad no existe como tal, sólo nuestro desacuerdo con las circunstancias que se presentaron cobra dimensión únicamente en mi propia mente.
Las adversidades están hechas para estimular y no para quitar el ánimo. El Espíritu humano se fortifica en la lucha. Yo Soy.
De: María Elena Rovirosa