Por Eduardo Claure
Un octubre se recuperó la democracia y en otro octubre nuevamente se la pierde. Pareciese título de dramática telenovela en la que “la chica” se va, o “el jovencito” vuelve, siempre en octubre. Los sucesos políticos del último medio siglo pasado nos han ingresado a una trama malévola, siendo que en la actualidad se está perdiendodefinitivamente la institucionalidad democrática, la independencia de poderes, el respeto a la ley, la CPE y cuanta norma existe en materia de la administración política boliviana y lo más peligroso: se está cambiando el concepto de democracia. A ello se suma la inexistencia de liderazgos políticos significativos, poquísimos partidos políticos como tal, se ha perdido el sentido histórico de lo que es el desarrollo político, seguimos en las intervenciones partidarias en el manejo de la cosa pública absolutamente improvisadas, el dolo a lo público es una constancia, se nutre al pueblo con slogans, clichés, que han convertido a la acción política en meros anuncios comerciales, no se ha superado el compadrerío, la meritocracia ha sido sustituida por la lealtad arrodillada deconmilitones y entornos palaciegos obcecados con el poder y sus prebendas, continúan los “errores y no delitos”, se ha expandido la informalidad y el contrabando, el narcotráfico se pasea como perro por su casa, los más degradados actos y vicios humanos y políticos han pasado de la individualidad a expandirse a los actores políticos en función de poder, los más execrables ejemplos parecen hoy virtudes y lo inmoral y deleznable de los otrora valores y virtudes sociales y políticas (ética y moral) definitivamente ya no existen en la política boliviana. Se ha perdido la cortesía, la doctrina, la educación, lacorrección y el cumplimiento, en su lugar han aflorado la ineptitud, la incapacidad, la inhabilidad, la torpeza, la desconsideración, la incorrección y la descortesía. Se ha perdido la legalidad, el acatamiento al referéndum, al plebiscito, al acto electoral, a un voto un ciudadano. A la política se le ha cercenado lo que debiera ser su habilidad, su arte y ha emergido sustituyéndolo por la astucia y sagacidad amañada, a cambio de lo que debiera ser lo probo. No se ha superado las viejas taras que lastran al desarrollo socio económico y social boliviano. La visión país no se la ve por ningún lado. Reaparecen los federalismos e independentismos tribales y retrógrados, viciados por actitudes racistas y discriminadoras que impiden la complementariedad social, económica y cultural. Se ha olvidado el valor de lo simbiótico. Se ha antepuesto lo racial frente a la riqueza de lo multi y pluri.Se ha llegado a la hez de la política.
Lo obcecado del poder por el poder ha matado a toda una generación política, como fueron las “pititas”. La aparición de “organizaciones sociales políticas” y partidos nada formales, han generado discursos coyunturales nada solventes en propuestas político ideológicas y económicas; se ha perdido de vista a los contenidos intelectuales que pensadores proveyeron en el pasado apropuestas políticas para el desarrollo: verdaderos nuevos paradigmas, hoy priman los panfletos, trípticos, afiches y “memes” que han sustituido a los profundos contenidos de verdaderas propuestas de desarrollo nacional, como país, como un todo, único, inmanente e insustituible de Patria, Nación, País. Las propuestas muy cortas de vista y de inmediatez que asusta a lo planificado e integro, ha sido sustituido por lo fácil y coyuntural, y, si es proclive a lo corruptela, mejor.
En este contexto los discursos con claros contenidos filosóficos, doctrinales, ideológicos, sociológicos e históricos, han sido suplantados por el insulto, el vituperio, la diatriba, la ofensa y el odio que exhalan asambleístasde masas que no tienen otra razón que aplastar al oponente con toda la hostilidad posible, a ellos se les da la figura de enemigo y no de un contrincante u oponente. El dialogo de enseñanza, de intercambio de puntos de vista constructivo, de debate, ha sido sustituido por un antagonismo hostil, dañino, rencoroso, perverso, cuando todo debiera transcurrir de forma favorable y propicio tal como se requiere para lograr objetivos superiores en materia política, social, económica y jurídica, que la naciónespera.
Los males que arrastran a Bolivia hacia un despeñadero sin retorno, entre muchísimos otros son: i) partidos políticos emergidos de fenómenos sociales y políticos coyunturales; ii) ausencia de verdaderos liderazgos, formados en las aulas de la lectura y la formación académica o, tal vez, del don natural de personalidades que en el espectro político boliviano han dejado de tener presencia -o fallecieron, o, los mataron-; iii) las universidades han dejado de lado su rol constructor y desarrolladores de mentes para el conocimiento, la escritura, el recrear ideologías, el despertar del brillo natural de individualidades privilegiadas en el conocimiento, la filosofía y la elevada cultura, la moral, la ética y la política; iv) los sistemas educativos han dejado de enseñar lo cívico, la educación contra la corrupción, el emprendurismo, lo creativo, el análisis critico de la realidad, la organización de ideas proactivas para el desarrollo, el respeto a la ley, a los derechos humanos, valores, principios y otros elementos ante cuya ausencia y/o debilidades emergen los peores males que carcomen la institucionalidad y generan corrientes destructivas de la familia, la sociedad y la naturaleza misma. Por ejemplo, la superación de los graves problemas ecológicos y medio ambientales de la actualidad, no se corregirán, solucionaran o superarán con spots televisivos, cuñas radiales o cortos videos que inundan las RR.SS. a través de los medios electrónicos nunca antes imaginado: hemos salido del aula y el pizarrón para ingresar a un mundo virtual que controla las mentes y no a la inversa; v) los sistemas de comunicación política del proceso de cambio ha sido de tan sofisticado manejo (al mejor estilo de Joseph Goebbels, Ministro para la “Ilustración Pública” del Tercer Reich entre 1933 y 1945), del cual la oposición política boliviana no ha podido salir o escapar desde el 2006. Los mensajes, imágenes y hechos políticos contra todos los referentes de la oposición han sido y aún son parte de ese manejo calculado y frío del juego de palabras, figuras e imágenes que se ha introducido en el imaginario popular, que ha destrozado la realidad con la que debiera mirarse a los opositores, pero el juego de palabras ha sido destructiva: separatistas, neoliberales, gamonales, vende patrias y otros bautizos a la oposiciónhan sido tales como el despreciar la corbata, el traje y otras indumentarias propias de los k’aras, blancoides, a cambio de simbologías “ancestrales”, aún cuando luego de pasado el show “del empoderamiento del pueblo” los originarios vistieron, precisamente costosos trajes y vistosas corbatas. (Goebbels creo un discurso único y fanático para acallar a los que pensaba diferente. El insistía que la propaganda política, los modos de comunicar y convencer a las masas era de vital importancia. Era el encargado de la comunicación de los actos multitudinarios y las consignas, pero también del manejo del arte que pasó a ser oficial. Entendió, antes que muchos, de la importancia de los nuevos medios decomunicación, además de la prensa grafica. Impuso su mano firme a la radio y el cine. Nada quedaba fuera de su orbita. Se mostraba impiadoso con los que se animaban a disentir. Construyo una voz única y potente. Su ambiciónmáxima, la vocación final, era la unanimidad del pensamiento colectivo nazi. Un ejemplo inicial de su odio y de su capacidad de manipulación, fue “La noche de los cuchillos largos”, provocó una serie de asesinatos para eliminar opositores y posibles adversarios explicando que aquellas atrocidades eran un acto de defensa y justicia); vi) La oposición ha perdido la capacidad de reacción, de reorganización, de elaborar ideas proactivas, de elaborar discursos con imágenes positivas que penetren a la psiquis boliviana; vii) Se anuló o disminuyó drásticamente las voluntades donde se articulen actores políticos distintos y diversos que posibiliten converger hacia un solo objetivo superior, se generó la imagen de derrotados y enemigos entre todos ellos como oposición; viii) la población no confía en partidos y referentes que aparecen -legitimo- en tal o cual coyuntura, el pueblo y sus clases quieren confiar en partidos reales con dinámica propia, con contenidos que den certidumbre, con acciones en todo el territorio nacional y “aproximados realmente al pueblo”; ix) La deliberación, el debate constructivo, los consensos debieran ser una practica que se recupere para la reconstrucción de líneas de acción partidaria masiva y dé paso a la participación de nuevas generaciones de referentes y oradores que surjan de las multitudes en sectores hasta hoy dejados de lado; para un ejercicio semejante debe aproximarse a instituciones y organizaciones de la sociedad civil para volver a enamorar Bolivia, encontrar un rumbo para su historia, generar dinámicas internas, cualificar verdaderos cuadros, lealtades y donde se destaquen cualidades individuales y organizacionales generadoras de líneas programáticas en el marco de una propuesta política ideológica de largo plazo; x) es inexplicable que personalidades como Tuto Quiroga no hubiesen construido partido en más de un decenio y medio, al mismo tiempo que muchos partidos o de los que quedan, no hubiesen reverdecido con liderazgos noveles y han dejado pasar la historia por encima de ellos por mezquindades estúpidas de herederos de colores y signos, que nunca llegaron a ser nada e impidieron que otros surjan, se quedaron como “jefe del partido“ y nada más. Será que un viejo partido con historia pudiese cobijar a un referente con cualidades propias y gestar un “armado” de una dupla por ejemplo Tuto y Sole (Inteligencia y experiencia con fuerza y coraje. Academicismo y proximidad al pueblo. Contactos externos y contactos vecinales. Experiencia en el manejo nacional con lo local).? Existen otras posibilidades de “armar” una otra dupla.? Pues, nómbrenla y manos a la obra. De no cambiarse el curso de la historia inmediata, el panorama a futuro y de largo plazo, es muy oscuro y terrible. Pero, podría llegarse al Bicentenario con capacidades reales para devolverle a la Patria, su razón de ser: soberana condemocracia y fundamentalmente con: Libertad.!! Bolivia nació libre.!! No se la deje morir en manos de esclavistas y del submundo narco, para ello la clase política debe someterse a un profundo acto de constricción respecto lo que han provocado, pues la realidad política actual, es obra de ellos, no del pueblo.
Más allá de influencias externas e internas, más allá de una rapacidad al sistema electoral, más allá de las sombras tenebrosas que se ciernen sobre Bolivia y la región desde lo más profundo del averno del poder oscuro(elecciones en EE.UU. y de Bolivia que definirán los equilibrios políticos en el continente, la región y el mundo), queda salvar para lo futuro lo inconcluso de la Patria, salvar la democracia, la institucionalidad, un nuevo sistema informático electoral y la recuperación de un padrón electoral real -si debe volverse al recuento manual, mejor, el ingresar y confiar a lo electrónico fue el peor error, si las elecciones subnacionales se dan bajo el mismo sistema informático electoral (y con las mismas caras conocidas), chau oposición: se replicará de calcado la experiencia del PRI mexicano con todos sus males aumentados y corregidos, Sinaloa (sus carteles) y Chiapas incluidos-, para todo ello debe y de raíz, sustanciarse una nueva ley de organizaciones políticas, de todo el sistema de partidos para el desarrollo político y del sistema electoral integro. Con seguridad cientistas sociales, politólogos, historiadores, académicos, políticos (cuando no) y similares, definirían con mejor sustancia y certidumbre las líneas de acción que debieran orientarse e implementarse en esta dirección, la presente nota, es sólo una idea reflexiva de un día feriado de difuntos.