AGENCIAS/MARCA
(Septiembre 11/2020) El sonado debut de Eduardo Camavinga en el Francia-Croacia no sólo ha confirmado que se trata de uno de los centrocampistas más prometedores del planeta fútbol, sino que alimenta un poco más la batalla que se presenta entre los grandes por hacerse con este chaval del Rennes de tan solo 17 años. Deschamps le hizo entrar por Kanté y bastó media hora para dejar a todos de acuerdo por su forma de actuar y de jugar pese a ser el tercer futbolista más joven en estrenarse con Les Bleus. Han pasado más de cien años para volver a ver a un menor de edad debutar con la absoluta de Francia: Julien Verbrugghe lo hizo con 16 años y 10 meses en 1906 y Maurice Gastiger con 17 años y 4 meses en 1914. Camavinga lo ha hecho con 17 años, nueve meses y 29 días.
La batalla por convencer a Camavinga ha comenzado ya. El Real Madrid lleva tiempo detrás del jugador a través de Juni Calafat, responsable de fichajes del club, y el último en posicionarse claramente ha sido el PSG. Leonardo se rindió en elogios hacia el jugador en una entrevista a Canal Plus Francia la semana pasada y Thomas Tuchel lo hizo hace sólo dos días. «No le diría que no a Camavinga. Es uno de los mejores jugadores de la Ligue 1 y tiene un buen futuro, pero juega en el Rennes que este año juega Champìons League. Y esto no es el Monopoly».
Como bien dice Tuchel, PSG y Real Madrid han firmado una tregua hasta el próximo verano dado que el billete de Champions del club francés y la crisis económica por la pandemia hacían imposible un traspaso que rondaría los 70 millones de euros. Ahora toca trabajar en la sombra para intentar allanar el camino de cara al año que viene porque el jugador confirmó además ante este nuevo escenario que se quedaba un año más en el club de su vida.
Cada club va a jugar sus bazas. El Madrid va a emplear la de Zidane, que también apuesta por este mediocentro que tras un año de Champions llegaría incluso más curtido. A eso hay que añadir el trabajo de hace ya tiempo de Calafat, que conoce bien al jugador y a su entorno. Hay conversaciones hace tiempo y el jugador está dispuesto a esperar al Real Madrid.
LOS DATOS
De hecho, de haber fructificado un traspaso este mismo verano, el club blanco era sin duda el mejor colocado.
Pero el PSG no es un enemigo fácil tras este giro inesperado que ha dado hacia Camavinga. Parecía alejado ya de la batalla y sus miras estaban puestas en Aouar, del Lyon, y es cierto que ahora mismo lleva desventaja con respecto al Real Madrid, pero parece decidido al menos seducir en este tiempo al mediocentro como se refleja en las declaraciones recientes de la cúpula del club.