Noticias El Periódico Tarija

YEDA (ARABIA SAUDÍ), 3 ENE

El piloto español Carlos Sainz afirmó que se siente halagado por el catarí Nasser Al Attiyah, vigente campeón del rally en coches y gran favorito para revalidar el título, quien aseguró que el madrileño es su gran rival para la carrera que comienza el domingo en Arabia Saudí.

El español, que participará en su decimotercer Dakar, valoró las cualidades del Toyota Hilux que lleva Al Attiyah, del que dijo que «ha dado un paso adelante».

«Nosotros confiamos que nuestro coche esté más preparado que el año pasado. Sobre todo para no tener problemas en el aspecto mecánico», añadió Sainz, cuyo buggy de Mini sufrió mucho en la última edición con constantes averías en el sistema de inflado y desinflado de las ruedas.

«Para nosotros es fundamental que el Mini funcione bien y que solo nos concentremos únicamente y exclusivamente en luchar, conducir rápido y equivocarnos lo mínimo posible», añadió.

Sainz se mostró a favor de que en seis de las trece etapas de este Dakar la organización entregue justo antes la salida el «roadbook», la hoja de ruta con las indicaciones para no desorientarse en el recorrido, en lugar de la noche anterior.

«Creo que está bien porque había muchas suspicacias y de esta forma la cortan», opinó Sainz, sobre la polémica que hubo el año pasado con los especialistas de los equipos oficiales que revisaban las indicaciones de la organización en mapas y aportaban mayores detalles e información al piloto.

El madrileño admitió que lo poco que ha trascendido del estreno del Dakar en Arabia Saudí es que en la primera etapa «habrá un poco de todo, con zonas de piedras, zonas sinuosas, zonas rápidas y dunas».

«Va a ser una especie de aperitivo de lo que será el rally. La navegación en el segundo tercer y cuarto día será complicada, con muchos cruces donde encontrar el camino correcto se complica, no es como cuando vas en el desierto que tienes que seguir un rumbo», concluyó.

La primera edición del Dakar en Arabia Saudí partirá de la ciudad costera de Yeda, en el Mar Rojo, y recorrerá más de 7.800 kilómetros por la península arábiga repartido en 13 etapas que finalizarán el 17 de enero en Qiddiya, una futura gran ciudad de ocio que se construirá a las afueras de Riad.