Noticias El Periódico Tarija

Regiones como Santa Cruz, Potosí y Tarija, entre otras, decidieron ingresar en un paro indefinido reclamando por el respeto al voto ciudadano en las elecciones generales de este 20 de octubre. Seguramente serán jornadas duras, drásticas, porque hay importantes sectores de la sociedad que están molestos y exigen sus derechos, la población tendrá que tomar sus previsiones.

El gobierno nacional cursó una invitación a la Organización de Estados Americanos (OEA) para que,  ante las dudas generadas y la susceptibilidad de fraude, realice una auditoría externa al proceso electoral. Si, a la misma OEA que se pronunció este lunes sembrando más dudas sobre el trabajo del Tribunal Electoral manifestando que “de manera inexplicable” detuvo el conteo rápido de los votos. Si, a la misma OEA a la que la oposición al gobierno usó como referencia para justificar sus temores de irregularidades y sustentar sus denuncias crecientes. Y es la misma OEA la que le aceptó la invitación al gobierno y se realizará esa auditoría, solo que será con carácter vinculante, es decir, lo que salga de ahí tendrá que ser respetado si o si. Si la OEA concluye que hay segunda vuelta electoral el 15 de diciembre, así debe ser, Evo tendrá que aceptar sin chistar. Si la OEA dispone lo contrario, Carlos Mesa y la oposición tendría que proceder igual.

Ante la falta de un árbitro nacional creíble, el Tribunal Electoral se aplazó y generó escenarios de inestabilidad injustificables, recurrimos a uno de carácter internacional, duro golpe para la democracia boliviana. Se entiende que el gobierno está de acuerdo que la OEA tome la posta, falta que Mesa lo haga, si sucede así… ¿ en qué quedan todas las movilizaciones que comienzan en medio país?… se justifica que continúen en pie?, o lo mejor será dejar que la nación retome su dinámica y se someta a un acuerdo que permita aceptar el resultado que sea?… y de manera civilizada, pensar en que Evo seguirá cinco años más o prepararse para una transición responsable y madura, que le devuelva el aliento a la gente y certidumbre a su horizonte de vida, sabiendo que viene un nuevo gobierno, al que habrá que concederle el beneficio de la duda mínimamente.

No fuimos capaces de organizarnos mejor entre nosotros mismos y este es el camino que se abre como opción ante el caos de estas últimas horas, solo resta el compromiso y seriedad de las partes para no perder lo poco o mucho de lo bueno que pudimos haber cosechado estos últimos años.