LA CIUDAD NO ES SOLO EL CENTRO

Con la llegada de las lluvias, el verde comienza a aparecer, las hojas plomizas desaparecen junto al polvo seco que las estuvo cubriendo por el seco invierno, todos recibimos con alegría la primavera y el verano, con sus colores y aromas, con sus cálidas temperaturas. Pero así como la naturaleza renace y nos sorprende por su belleza, también hay lugares en la ciudad descuidados y casi olvidados. El mantenimiento y cuidado del ornato público es tarea del municipio pero en realidad es de todos, Tarija ciudad se ha caracterizado por sus bellas plazas y jardines, por sus hermosas rosas que enamoran a los visitantes, por sus frondosos ceibos, por la rica variedad de plantas que muestran su mejor cara justamente en esta temporada. No podemos dejar de destacar el trabajo de cientos de empleados municipales que se encargan de que todo luzca casi perfecto. Tampoco se pude negar que más allá del centro de la ciudad, por los barrios más alejados, por donde no caminan los turistas… la dejadez y el olvido son una constante.

Lejos del centro, encontramos vegetación desbocada, creciendo por doquier, arbustos que dan un mal aspecto a esas zonas, que surgen en las aceras o también en las áreas verdes que no reciben igual trato que las del casco viejo. Allí los vecinos no tienen la dicha de deleitar la vista con los arreglos, por el contrario, deben luchar con las incomodidades que ocasionan y la mala impresión que le dan al lugar, más allá de convertirse en refugio de alimañas y zancudos que salen cuando cae la noche. Sabemos que es una tarea compleja pero la alcaldía también tiene que posar sus ojos en estos vecindarios que tienen tanto derecho como los que están en el centro de la ciudad.