Noticias El Periódico Tarija

Hay una serie de actividades que no se pueden hacer en la plaza de armas de la ciudad de Tarija, como manifestaciones políticas, marchas, protestas, reuniones, etc… sin embargo todo lo que está prohibido se hace o se sigue haciendo. 

Desde que se ensancharon las aceras los espacios para estacionar se redujeron radicalmente sin existir una opción distinta, pues los vehículos antes estacionaban a la derecha dejando un espacio libre para circular, eso le daba cierta fluidez al tráfico y permitía que hayan motorizados detenidos, sin funcionar, y no tantos dando vueltas sin parar. Es evidente que en las arterias más estrechas no hay como detenerse, no hay forma porque no hay espacio, pero en otras como las de la plaza «Luis de Fuentes», que son más anchas, si es posible aunque no se debe porque está prohibido hacerlo. Lo que sucede es exactamente lo contrario ya que no sólo no se respeta esta disposición sino que ante los ojos de todos, no hay autoridad que imponga la ley y todos terminamos siendo parte de esta peculiar situación. 

No sólo todo el que puede se parquea en la plaza sino que se lo hace en ambos lados de la calle, a la izquierda y derecha, en especial en La Madrid, Gral. Trigo y 15 de abril, durante la noche y en especial los fines de semanas, se transforman en un «túnel» por donde vehículos de mayor envergadura deben pasar calculando muy bien. Es una imagen de desorden y falta de autoridad que se repite permanentemente, desdibujando nuestra ciudad. Lo malo es que este fenómeno se repite en otras calles también, todavía más estrechas. Se debe tomar una decisión clara y sin vuelta, o se deja parquear pero sólo en un lado de las calles o no se lo permite, esta actitud a medias sólo genera coas y congestión que nos perjudica a todos. En su momento dijimos lo que pensábamos sobre las veredas pero ya deberíamos haber generado alternativas de estacionamiento que superen estos problemas que crecen en la medida que el parque automotor aumenta y es cada vez más asfixiante.