Seguimos preguntándonos qué sucede en el valle central donde se detectan
tantos casos de cáncer, seguimos viviendo así, con la pregunta colgando
sin una respuesta que termine con ella. Es como que algo que nos esta
matando va pasando a segundo plano en nuestras prioridades, parece
absurdo pero posiblemente así sea, porque si no estamos en lo correcto
no se comprende como podemos continuar caminando sospechando de lo que
nos está aniquilando y no mover un dedo para tener certezas.
Rumores y comentarios hay muchos, especulaciones a flor de piel otro
tanto, pero lo que vamos escuchando es de que algo sucede con el agua
que consumimos, ya sea como elemento para regar cultivos o para nuestro
propio consumo. Recordemos que hace unos meses salió un informe oficial
del gobierno nacional indicando que en Tarija se detectan niveles muy
serios de agro químicos y plaguicidas en las aguas de sus ríos y
quebradas, las mismas con las que regamos lo que comemos, ni que decir
de la influencia nefasta que podrían tener las lagunas de oxidación en
el río Guadalquivir y en las napas subterráneas, resulta que nadie lo
sabe ni a nadie le inquieta saberlo. Igual o peor grado de influencia
podría tener el botadero de basura de Pampa Galana ya que se desconoce
qué pasa con los líquidos provenientes de toneladas de desechos de todo
tipo que pueden estar siendo absorbidos por el suelo desde hace décadas
atrás…lo irónico es que hay varios pozos de agua alrededor del mismo y
nadie se inmuta por saber si están libres de contaminación o no.
Tambien se escucha que en la fuente de provisión de agua para Tarija, se
habrían enterrado desechos tóxicos envenenándolo pero no deja de ser
eso… un algo no confirmado. Hoy, un experto extranjero nos dice que
dejemos de clorar el agua que vamos a beber porque el cloro produce
cáncer y resulta que desde siempre justamente hemos estado haciendo eso,
clorando el líquido elemento. Según quienes lo hacen se respetan
parámetros internacionales pero ya queda la duda clavada, no sólo por
saber si es cierto este terrible anuncio sino también por ver si a
alguien le importa resolver la incógnita…parece que a nadie y en esa
apatía generalizada seguiremos lamentando tener parientes, amigos,
conocidos, enfermos o ya fallecidos por causa de esta horrible
enfermedad.