Roberto A. Barriga/Bolinfo/Tarija
(el Periódico-Marzo 12/2019) Isabel N. (nombre ficticio para proteger a la identidad de la víctima), tenía 9 añitos, era una niña que le gustaba jugar alegre y traviesa, su familia no la protegió.
Un día su padre la tocó, quien a pesar de los rechazos de la infante, la violó.
Las violaciones eran continuas. El horror, la pesadilla y el silencio, hacen que Isabel N. piense en atentar contra su vida, al revelar que con 15 años no ve futuro alguno.
Según un informe de la Defensoría de la Niñez de Caraparí, estos hechos fueron avisados a la madre de Isabel N. pero la mujer no tomó acción alguna.
“La víctima habría puesto en conocimiento de su madre sobre esta agresión sexual, pero la misma no restituyó los derechos de su hija” dicta el informe.
El dolor de Isabel N. ante el silencio de su madre y la brutalidad de su padre es inefable.
La denuncia fue promovida por la asesora legal de la Defensoría de la Niñez y la Adolescencia, Ximena Hernández, quien tomó conocimiento de los hechos a través de documentación existente en las oficinas de Caraparí.
El informe dicta que durante 6 años, Isabel N. sufre violaciones por parte de su padre biológico. La niña se encuentra en un estado emocional-psicológico tan deplorable que piensa constantemente en suicidarse.
Isabel N. es una de las cientos de niñas que sufren estos hechos, muchos quedan en el anonimato, lo único que quieren las menores como Isabel N. es que papá no las toque. (eP).