(ANSA) – AUSTIN, 18 OCT – «Será un fin de semana como cualquier otro», afirmó hoy el británico Lewis Hamilton de cara al GP de Estados Unidos, donde puede consagrarse pentacampeón mundial de la Fórmula 1 con tres fechas de anticipación.
«Intentaremos hacer lo que hacemos siempre y repetir lo de las últimas carreras sin pensar en otra cosa», explicó el piloto de Mercedes que manda con 67 puntos de ventaja sobre el alemán Sebastian Vettel, de Ferrari.
Sus triunfos en fila en Italia, Singapur, Rusia y Japón no parecen ser razón suficiente para entusiasmarlo con un festejo anticipado en Austin, donde -advirtió- «debemos mantener alta la vara porque Ferrari seguramente tendrá una fuerte reacción».
El británico apuntó a la obligación del equipo italiano de retomar la senda del triunfo para mantener alguna aspiración remota de dar pelea por el título o al menos de postergar su consagración.
«No se qué fue lo que cambió. Sólo se que este año di lo mejor de mí a partir de la segunda mitad de temporada y debo seguir así este fin de semana», destacó Hamilton, a un paso de igualar la marca del recordardo argentino Juan Manuel Fangio.
Sólo el alemán Michael Schumacher, que conquistó siete coronas en la Fórmula 1, logró superarlos e imitar la marca del «Chueco», una leyenda de este deporte, representa en sí misma una razón para ilusionarse.
«Tuve la oportunidad de conducir las máquinas de otros tiempos y me alegra manejar esta, con una evolución tecnológica notable. Fangio es el padrino de todos nosotros y pensar en igualar su marca realmente me emociona». Pero Hamilton no quiere descorchar champagne antes de tiempo y sabe que si bien el camino a repetir la corona es cada vez más corto, falta dar algunos pasos todavía.
«No creo que el título se defina este fin de semana», aclaró antes de enfocarse en lo inmediato: «Para mañana están previstas lluvias y debemos probar distintas opciones para llegar en condiciones de pelear por la pole».
El británico, de 33 años, es el hombre récord en ese rubro con 80 festejadas (12 por encima de Schumacher), la última de las cuales en Suzuka, donde también festejó triunfo y estiró su ventaja sobre un Vettel que vivió una pesadilla.
El alemán compartió responsabilidad con su equipo por la fallida elección de neumáticos en clasificación y largó desde el octavo puesto. Tras superar a varios rivales en carrera, un toque con el holandés Max Verstappen, lo dejó sin chances.
Al final, apenas si logró limitar los daños con un sexto puesto, pero quedó a un campo de distancia en el campeonato de un Hamilton que rápidamente salió a defenderlo frente a las críticas. «Creo que él hubiese hecho lo mismo por mí», dijo hoy respecto de esa defensa al recordar de paso que, como él, Vettel «ganó cuatro títulos en la Fórmula 1 y siempre fue respetuoso conmigo cuando la suerte no me acompañaba».
El líder del campeonato pronosticó una dura batalla en Austin: «Aquí se puede luchar y por eso me gusta este circuito.
Este es también un país con una gran cultura y prácticamente es el centro del universo».
Estados Unidos parece menos entusiasmado con la Fórmula 1, que con la Nascar, en la que Hamilton podría verse tentado a probar suerte a futuro: «Nunca corrí en un óvalo, donde las máquinas son más veloces».
«Quizás, algún día pruebe. Por ahora nunca se me ocurrió hacerlo, pero nada me gusta más que correr en la Fórmula 1», aclaró el británico, a contrapelo de lo que supone el ex bicampeón mundial español Fernando Alonso.
El asturiano ya probó las mieles de la gloria en otras categorías en las que competirá el año próximo, cuando se tomará una «temporada sabática» de la Fórmula 1 porque, dijo en su momento, la categoría ya no lo entusiasma como antes.
El piloto de McLaren afirmó que la Nascar «ofrece sensaciones feas, hasta bizzarras en un test, pero en carrera todo cambia y es mucho más divertido. Lo más lindo es que te saca de la zona de confort», relató en lenguaje de manual de autoayuda.
Alonso reconoce hoy el talento de Hamilton, con quien compartió equipo en McLaren-Mercedes y por entonces se decía que se odiaban, aunque años después el británico afirmaba que el español «fue el único compañero del que aprendí algo».
«Desde que comenzó su carrera en la Fórmula 1, sabíamos que Lewis sumaría cinco o seis títulos, aún cuando su decisión de pasarse a Mercedes (en 2013, Ndr) no se veía en ese momento como la más acertada», destacó el español.
«Fue campeón en 2009, cuando no tenía la mejor máquina, y por eso creo que merece disfrutar de este momento», agregó Alonso, campeón mundial en 2005 y 2006 con Renault, equipo al que regresó en 2008 antes de pasarse a Ferrari.
Sin Alonso como compañero, Hamilton sumó su primera corona como piloto de McLaren-Mercedes en 2008, un año después que Ferrari, que supo capitalizar esa mala relación entre ambos, festejase por última vez un título gracias a Kimi Raikkonen.
El finlandés, que está dando sus últimos pasos en la escudería italiana, confesó hoy no sentirse triste por su partida y, de paso, aclaró: «Vettel y el Mundial ya no me interesan».
«Estoy aburrido del mundo de la Fórmula 1 y lo único que deseo es correr», completó Raikkonen, de 39 años, cuarto en el campeonato y quien será reemplazado en Ferrari por el juvenil monegasco Charles Leclerc, hoy en Sauber.
Sus dichos anticipan que no pretende colaborar demasiado con Vettel para impedir que Hamilton festeje por anticipado, como ocurrirá si gana en Austin y el alemán no va más allá del segundo puesto, entre otras opciones.(ANSA).