AMSTERDAM, 13 OCT
Holanda buscaba su primer triunfo en la Liga de Naciones de Europa y lo logró con un categórico 3-0 frente a Alemania, a la que dejó en el último puesto del Grupo 1 que comanda Francia con cuatro unidades.
Cruyff formó parte de aquella Holanda recordada como la «Naranja mecánica» que brillaba por su estilo de juego y perdió la final del Mundial 74 a manos de la anfitriona Alemania por 2-1 en el estadio Olímpico de Munich.
Hoy, 44 años después, comandada por Ronald Koeman (quien al igual que Cruyff supo jugar en Ajax y Barcelona) Holanda cantó victoria con goles de Virgil van Dijk a los 30′, Memphis Depay a los 87′ y Georginio Wijnaldum en tiempo de descuento.
Fue el primer festejo en esta Liga de Naciones, en la que cayó por 2-1 en el estreno frente a Francia, flamante campeona del mundo en Rusia, cita a la que Holanda brilló por su ausencia y Alemania se despidió de la corona en primera ronda.
El equipo que alzó la Copa del Mundo en Brasil 2014 por cuarta vez y al mando también de Joachim Loew sigue sin encontrar el rumbo y hasta podría descender en caso de una nueva derrota, el martes como visitante de Francia, en París.
Pendiende de lo que suceda ese día estará Holanda, que aprovechará la jornada para disputar un amistoso frente a Bélgica en el estadio Rey Balduino de Bruselas, donde los Diablos Rojos superaron 2-1 a Suiza el viernes en el Grupo 2.
Loew, al mando de la selección teutona desde el Mundial que Alemania albergó en 2006, no lucía preocupado en la previa, pero habrá que ver cómo se toma esta nueva derrota en la que la fragilidad defensiva alemana resultó alarmante.
«Die Mannschaft» se vio superada hoy por una juvenil Holanda que le cedió el control del balón, pero lastimó cuando le dieron la oportunidad, cosa que no hizo Alemania pues dilapidó las ocasiones que generó en el partido.
El local pasó algunos sobresaltos en el arranque, pero una vez superados comenzó a manejar el trámite del partido y a llegar con más continuidad sobre la valla defendida por Manuel Neuer, responsable en el gol que abrió el marcador.
Una mala salida del arquero del Bayern Munich en un tiro de esquina ejecutado por Depay le permitió a Ryan Babel conectar de cabeza el balón, que se estrelló en el travesaño y le quedó servido a Van Dijk para el 1-0.
Alemania sintió el golpe y buscó el empate con ímpetu, pero sin muchas ideas ante una Holanda que esperó en su campo para meter una nueva estocada, que Depay estuvo cerca de lograr con un cabezazo apenas ancho antes del final del primer capítulo.
Al regreso de los vestuarios, la visita se hizo dueña de la pelota y de las acciones y estuvo cerca de lograr la igualdad con un remate de Mats Hummels que Babel salvó sobre la línea de sentencia apenas comenzado el complemento.
Leroy Sané, mediocampista de ascendencia senegalesa que juega en el Manchester City y había ingresado momentos antes, falló frente al arco a los 65′ con un remate que se fue desviado ante la atenta mirada de Jasper Cillessen, arquero del Barcelona.
Con Depay como estandarte, Holanda respondía con tibios ataques, hasta que a poco del final Quincy Promes habilitó al delantero del Olympique Lyon para el 2-0 que terminó de sentenciar el pleito, aunque no sería la última emoción.
El propio Depay estrelló un remate en el travesaño minutos después, antes de que Wijnaldum, mediocampista del Liverpool, decretase el 3-0 definitivo con un remate rasante que le dio un resultado algo exagerado al marcador final.
Holanda festejó su primera victoria ante Alemania en 26 años y logró el triunfo más abultado de la historia en un partido oficial frente a ese encumbrado rival, hoy venido a menos, en el único partido de la jornada correspondiente a la Liga A.
