JOAQUÍN JORDÁN AZURDUY
En la ciudad de Santa Cruz el plantel de Vikingos perdió frente a Universidad de Santa Cruz por 61 a 57 en un partido dónde lo lamentable fue la actuación de los árbitros que favorecieron desde un inicio al plantear local.
El cuadro tarijeño decidió abandonar el campo de juego por la parcialización de la dupla arbitral para con el local, lo que originó también que el partido terminara faltando 3 minutos, lo horroroso es que en un partido donde se definía al equipo que salvaba la categoría, la federación puso a dos árbitros de Santa Cruz y uno de Quillacollo que favorecieron de total manera al conjunto local cobrando cosas qué no eran y lo más lamentable perjudicando a un equipo que estaba haciendo un gran partido, luchando punto a punto y ahora está obligado a jugar el descenso, no por perder en cancha si no porque los árbitros le jugaron una mala pasada.
Es una pena que el arbitraje que se ve en la liga boliviana de básquet no sea tan profesional y que ellos sean los artífices para hacer cambiar un encuentro, es lamentable que tres personas decidan el futuro de un club y además que no puede ser que los árbitros no sean imparciales para que este torneo siga creciendo.
Se espera una sanción a los que estuvieron a cargo en la parte arbitral y se espera también que la federación tenga criterio a la hora de designar a los jueces.
Cuartos
UNIVERSIDAD STA. CRUZ 23 11 14 13 61
VIKINGOS 10 20 17 10 57