Una noticia que preocupa y en demasía, es la que nos dice que estudiantes de la unidad educativa Aniceto Arce en la ciudad de Tarija, estaban consumiendo agua no potable y contaminada… así es, es para no creer pero es verdad. La información la dio el Servicio Departamental de Salud, el agua proviene de un pozo perforado para tal misión, lo que no se dijo nunca es que les darían así nomas el agua, sin tratar, sin cloro, directo del fondo de la tierra al estómago de niños y jóvenes, una irresponsabilidad absoluta que puso y pone en riesgo su salud. Por si fuera poco, el Sedes encontró elementos micro biológicos sin precisar exactamente de qué se trata pero dejando entrever que no es nada bueno.
Al evidenciar esta situación debemos preguntarnos si no está sucediendo en otros casos también, en otros pozos, o más bien deberíamos cuestionarnos por qué no puede suceder considerando este grave ejemplo que es mas serio de lo que imaginamos. Cuando hablamos de servicios y saneamiento básico, reflejamos que tan atrás se han quedado en las reales prioridades de los políticos para los que primero está una plaza, un coliseo, un mástil millonario u otra obra, que tan lejos están ellos de la realidad que vive la gente de a pie, la misma que los eligió, no es tan difícil identificar las necesidades ciudadanas, más lo es encontrar líderes que les interese atenderlas.
Autoridades actuales han elaborado campañas publicitarias ruidosas destacando la perforación de pozos hídricos como la clave para acabar con la escasez de agua en Tarija, se le ha dicho a la gente que se han incorporado millones de litros al día al caudal con lo que la época de estiaje pasó a la historia… nada más alejado de la realidad. Lo complejo de estos anuncios es que queda la enorme duda de cómo se está distribuyendo el agua de los pozos a esa gente, ¿igual que al colegio Aniceto Arce, del pozo a su casa, sin tratamiento alguno, sin ser potable ?… ¿ quién le garantiza al vecino la calidad de ese líquido?, ¿Cómo sabemos que no está contaminado desde abajo?… recordemos que las lagunas de oxidación son un riesgo potencial así como el botadero de basura de Pampa Galana que viene «chupando» lixiviados desde hace dos décadas… ¿dónde se va todo eso, se evapora, se esfuma?… ¿no va por dentro de la tierra con el riesgo de contaminar las napas de agua de las que se la extrae para dársela a la gente?… se está atentando contra la salud pública y eso es un delito y muy grave para colmo. Se debe iniciar ya una investigación para saber qué estuvieron tomando nuestros estudiantes, qué está consumiendo gran parte de la población a la que le dan agua de pozos, quién es el responsable de semejante aberración y qué consecuencias acarrea lo develado.