Mayo se está convirtiendo en un mes complicado en el municipio de la ciudad de Tarija, elecciones y reincorporaciones parecen marcarlo con nitidez. En el concejo municipal es inevitable pensar en lo que podría pasar por la nueva distribución de fuerzas, que abre incertidumbre ante los cambios probables, aunque en política, y a la boliviana, nada está dicho hasta que no se haga un anuncio oficial ante los medios y la población… y aún así. La duda radica en si el alcalde Rodrigo Paz podrá mantener la gobernabilidad de la que está gozando desde que asumió.
La notica que sorprendió a varios, es la que nos habla de un fallo judicial que ordena reincorporar a Rolando Ruiz en el cargo de secretario de movilidad urbana del que fue alejado la gestión pasada. A Paz no le queda otra que hacerlo porque sería muy desafiante no cumplir una resolución de esta naturaleza. Rolando Ruiz era de los de confianza del actual alcalde, luego de que le dieran la espalda a Oscar Montes junto a Francisco Rosas. Formaron un trío al que el ex alcalde le puso una cruz calificando de traidores a sus integrantes, no podemos dejar de mencionar que tanto Rosas y Ruiz tuvieron su lugar cuando Montes era autoridad, se hicieron con él y al parecer tenía tanta confianza en ellos que los hizo parte de su proyecto político, incluyéndolos en Unidos para Renovar (Unir), se dice que fueron ellos los que intentaron arrebatarle esta agrupación valiéndose de su presencia legal ante el órgano electoral, claro que se entiende que se pretendía seguir adelante con Rodrigo Paz, sobre las ruedas de Unir, mientras Montes se debatía en un rosario de juicios en su contra.
No se conoce en qué momento Ruiz y el alcalde se alejaron, lo mismo podría decirse sobre la relación con Rosas, lo cierto es que Paz perdió a dos hombres que aprendieron de política y que, además conocen muy de cerca a Oscar Montes, lo que podía darle una ventaja comparativa evidente frente a su ex aliado y ahora, muy duro detractor. Ya se veía que llevarlo a movilidad urbana era una maniobra para dejarlo fuera en cualquier momento, luego de que el sindicato de la Entidad municipal de aseo (EMAT), instancia que Ruiz dirigía por más de una década, se opusieran férreamente al cambio. En la Secretaría no tenía ese apoyo y se lo desvinculaba de algo que conocía de memoria y por eso, era un riesgo para el alcalde, por lo menos eso pensaba él… parece. Aún no podemos imaginar ver a Rolando Ruiz en su cargo anterior, muy cerca de Paz, puede que éste no tenga otro remedio de asumirlo pero lo lleve luego a un cargo de menor jerarquía y con más complicaciones, usando la misma táctica y que le dio buen resultado… pero temporal. ¿ Qué hará Ruiz?, es difícil decirlo, se ve complicado que acepte continuar en la alcaldía, puede que solo haya querido demostrar que fue despedido injustamente y por razones políticas… en esta película, su película, el malo sería Rodrigo Paz.