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Cultura Colectiva

Según los padres, la vida es como un animal salvaje y rabioso que a cada momento está tratando de tragarnos o aplastarnos como a un pequeño insecto. Todo lo que está fuera de las cuatro paredes del hogar es considerado como malo, agresivo o peligroso. La única arma que tenemos para enfrentar al lobo feroz son los estudios. Si no vamos a la escuela, sacamos buenas calificaciones y nos comportamos de manera decente, estamos condenados a fracasar. Viviremos debajo de un puente, beberemos vino barato siempre y nuestro único cobijo nocturno serán las estrellas.

Viéndolo desde esa perspectiva, dejar de estudiar no parece una mala idea. Más por el vino barato que podría convertirse en algún otro destilado, el cual no es tan agresivo una vez que surtió su efecto aturdidor en nuestro sistema nervioso. Pero cómo van a entender nuestros padres que los estudios no son tan necesarios hoy en día ni lo fueron en el pasado. Como ejemplo se encuentra el caso del escritor Jack Kerouac, el mimado de la generación beat, que abandonó la Universidad de Columbia para dedicarse a escribir.

Su fama está en su radicales anécdotas llenas de alucinógenos, alcohol, promiscuidad y jazz. Su mundo era perfecto, vivió como quiso y disfrutó de fama y trascendencia. Su existencia fue de las más placenteras hasta que falleció a los 47 años por una hemorragia interna como consecuencia de su intenso alcoholismo… Tal vez ese no sea un buen ejemplo para dejar la escuela. Otro caso literario de renuncia académica fue Octavio Paz. Ahora sí, con él no hay nada tragedia que ocultar. Paz dejó la universidad antes de obtener su título, pues sus inquietudes no encuadraban en las aulas. Su ambiciones lo llevaron a Yucatán, Valencia, París y de ahí al éxito.

Con estos ejemplos se puede confirmar la teoría de que no es necesario estudiar para llegar a la cima de la sociedad o, al menos, poder subsistir. Como no todos nacemos con el don de la pluma, aquí hay algunos ejemplos de ofertas laborales que no necesitan algún título y son altamente remuneradas.


Controlador aéreo

Un trabajo complejo y estresante pero muy bien pagado. Los mejores sueldos están en Europa y no requieren, en la mayoría de los casos, de algún título universitario. Si se logra dominar el estrés que provoca el aumento en el tráfico aéreo de hoy en día, se pueden ganar hasta 1o mil euros al mes.


Franelero

Según un estudio realizado en la Ciudad de México, las personas que trabajan en las calles como «viene-viene» tienen un ingreso mensual que va entre los 24 mil y 30 mil pesos. Si se hacen las cuentas, ganan aproximadamente $1,200 por día. Dicen los más dramáticos y celosos que sus sueldos superan los de las personas que tienen un posgrado. ¿Quién dijo que no se podía triunfar en México sin saber leer o escribir?


Funcionario de prisiones

Para trabajar aquí se necesita pasar un test y no haber estado previamente en una cárcel o tener antecedentes penales. En Inglaterra se tiene el registro de que los sueldos pueden llegar a las 33 mil libras por año, que es lo mismo a $872,380 pesos. Para las personas que no se les da el inglés y tampoco piensan en estudiarlo, pueden probar suerte en España, donde los sueldos llega a los 1,700 euros mensuales.  Si andar entre asesinos y delincuentes te parece un trabajo difícil, conoce 10 páginas en las que podrás ganar dinero extra, dando click aquí.


Bombero

Este oficio sólo es bien pagado del otro lado del mundo, porque es obvio que en Latinoamérica los trabajos más honorables son los menos pagados. Se podría juntar dinero para un boleto de avión a Europa y lo demás está resuelto, apagando incendios. Por supuesto, se necesita de entrenamiento exhaustivo y una salud física envidiable. Cuando se tengan estos requisitos se puede llegar a ganar entre 29 mil y 45 mil euros al año.


Vendedor

El sueño dorado de todos está aquí. No hay límites establecidos para el monto de dinero que se puede ganar, todo dependerá de las habilidades de negociación y persuasión que se tengan. Es posible que en México este oficio este devaluado porque todos son vendedores y se tienen que repartir a los clientes. Pero en países de Europa, trabajar como vendedor puede sustentar a una familia completa.

Si nada de esto te parece atractivo o posible, aún quedan las opciones de trabajar como limpiador de alcantarillas, exterminador de plagas, enterrador de cementerios o en una empresa de atención al cliente vía telefónica. Pensándolo un poco más, mejor sí hay que estudiar.

Si ya recapacitaste y le quieres dar una oportunidad al estudio, el medio más honorable para ganarse la vida, puedes conocer las 10 mejores universidades de México dando click aquí, o averiguar un poco más de las que se encuentran en Latinoamérica. Si ya te propusiste a buscar empleo y aún no lo obtienes, no te desesperes y lee este artículo para hacer un currículum perfecto y llamar más la atención.