Cultura Colectiva
Existen 7 preguntas que te llevarán a descubrir qué tan fuerte y verdadero es el compromiso entre tu pareja y tú.
Las respuestas de las siguientes preguntas no determinarán cuánto lo amas y cuánto te quiere él a ti, más bien se trata de conocer el nivel de compromiso que ambos tienen y lo mucho o poco que vale la pena invertir más tiempo en ese vínculo. Puedes amar a alguien hasta que te ardan los huesos, pero eso no significa que tengas una relación estable, sincera y sana con esa persona. Puedes no querer tanto a tu pareja, pero tal vez el equilibrio que tiene su noviazgo los lleve a enamorarse cada día más el uno del otro.
¿Sabes cuál de los dos casos es más parecido al tipo de relación que tienes?
Hazte estas 7 preguntas, de preferencia en algún lugar tranquilo donde puedas reflexionar y sin compañía que influya en tus respuestas. Analiza tus conclusiones antes de contestar cada interrogante de manera definitiva y no trates de engañarte si no te gustan las respuestas que salen de ti. En lugar de tratar de ocultar la verdad, concéntrate en definir si los problemas que están definiendo tu relación tienen solución o si lo mejor es que se den un espacio temporal o definitivo.
7. ¿Estoy segura de que esto es lo que quiero?
SÍ – Cuando no dudas en estar con la persona correcta en el momento adecuado, las cosas fluyen de la mejor manera.
NO – Vacilar y estar a medias no es una buena señal cuando se trata de amor; replantéate si seguir ahí es la mejor decisión.
6. ¿Soy yo misma cuando estoy con él?
SÍ – No hay amor más sincero que el que te acepta tal y como eres; si él adora tus virtudes y respeta tus defectos.
NO – Fingir que eres de otra forma sólo para agradarle más a tu pareja no sólo es mentirle, sino engañarte a ti misma.
5. ¿Lo conozco realmente en sus peores momentos?
SÍ – Cuando una pareja sigue unida durante y después de un momento difícil, el amor no sólo se confirma, también se refuerza.
NO – Es fácil sentirse enamorado y feliz cuando todo es color de rosa, pero el verdadero compromiso es el que no deserta aun bajo la tormenta.
4. ¿Somos grandes amigos también?
SÍ – La atracción física y sexual no lo es todo; si también te sientes conectada con él como si fuera tu mejor amigo, tu relación tiene mucho futuro.
NO – No confiar en el otro o no poder divertirte con él porque siempre guardan una pose que los define como «novios» es tan negativo como cuando deja de atraerte tu pareja.
3. ¿Nos comunicamos facilmente?
SÍ – Poder hablar, escribir o simplemente mirar a los ojos a tu compañero y comprenderse es un gran regalo que alimenta la relación.
NO – No saber escuchar o no poner atención son problemas que pueden solucionarse; pero si llevan años intentando comunicarse sin pelear, tal vez es momento de parar.
2. ¿Me presiono o lo presiono constantemente para que las cosas funcionen?
SÍ – En este caso, responder que sí es un gran problema; cuando se fuerzan las cosas o se «intentan» demasiado todo termina por explotar en algún momento.
NO – Si todo se da con naturalidad en su relación las probabilidades de terminar son mucho menos.
1. ¿Confío en él?
SÍ – Sin confianza no hay nada, el amor se alimenta de demostraciones pero también de la seguridad que sienta cada uno respecto a los actos del otro.
NO – Nunca sentirte tranquila a su lado te agotaría hasta que no quede nada más en ti para aportar a la relación.
Sólo hay dos tipos de relaciones:
1. Las verdaderas en las que todo sigue su curso con naturalidad y éxito.
2. Las falsas en las que se intenta tanto estar bien que ambas partes se olvidan de lo más importante, amarse incondicionalmente.