Agencias
Serán 9.000 kilómetros, la mitad de los cuales constarán de pruebas especiales, los que recorrerán los 337 vehículos inscriptos en la competencia
La cuadragésima edición del Rally Dakar, décima que se desarrollará en suelo sudamericano, fue presentada hoy en París por Etienne Lavigne, director de la tradicional y agotadora competencia.
Lavigne dio a conocer los contenidos técnicos de la carrera en la que compiten automóviles, motos, cuatriciclos, camiones y, desde hace un año vehículos UTV, que partirá el 6 de enero en Lima, Perú, y concluirá en la provincia de Córdoba, Argentina.
Los equipos se preparan por estos días para someter a las máquinas a las primeras verificaciones técnicas en Le Havre, puerto francés desde donde serán embarcadas rumbo al continente sudamericano.
«Como en África a fines de los ’70 y hoy en Sudamérica, los pilotos que participan del Dakar están impulsados por el mismo espíritu de aventura y la misma sed de desafío», comentó Etienne al presentar la competencia.
«Para esta edición excepcional hemos concebido un programa especial para satisfacer las expectativas de los competidores que esperan desafiar una vez más al desierto peruano, que fue incluido en las ediciones de 2012 y 2013», agregó.
El francés Stephane Peterhansel, ganador de 13 ediciones (seis con motos y siete con automóviles), incluidas las últimas dos, que le valieron el título de «Mister Dakar» es nuevamente el rival a vencer.
Peterhansel volverá a confiar en Peugeot, que el año pasado acaparó el podio en la categoría autos con los también franceses Sebastien Loeb y Cyril Despres, quien supo conquistar tres ediciones del Dakar en Sudamérica y un total de cinco con motos.
A bordo de un Toyota Hilux estará este año el príncipe qatarí Nasser Al Attiyah, ganador en 2011 con un Volkswagen Touareg y en 2015 con Mini y quien hace un año debió abandonar la competencia.
KTM es la marca que domina entre las motos en la era post Despres-Marc Coma. En 2016 se subió a lo más alto gracias al australiano Toby Price y el año pasado lo hizo con el británico Sam Sunderland. El año próximo, KTM apuesta también por el austríaco Matthias Walkner y por el francés Antoine Meo, en tanto que Honda le pone fichas a la experiencia del portugués Paulo Gonçalves y del español Joan Barreda Bort.
La juventud la aportarán en el equipo japonés el argentino Kevin Benavídes y el estadounidense Ricky Brabec, mientras que la nueva generación de Yamaha estará representada por los franceses Adrian van Beveren y Xavier de Soultrait y el argentino Franco Caimi.