ERBOL
Los padres jesuitas instalaron la mañana de este lunes una vigilia en la tumba del sacerdote Luis Espinal para impedir la exhumación de los restos del padre asesinado hace 36 años por la dictadura militar de Luis García Meza.
La exhumación debía realizarse esta mañana por orden del fiscal Genaro Quenta para establecer si existen elementos y comprobar que fue asesinado brutalmente y luego establecer algún grado de responsabilidad del excomandante de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), Jaime Niño de Guzmán, sindicado de ser uno de los autores intelectuales de la muerte de Espinal.
Niño de Guzmán no fue no notificado, motivo por el cual fue suspendido. El Superior Provincial de los Jesuitas padre Osvaldo Chiveches informó que su presencia ratifica el rechazo a la exhumación de los restos y al manoseo del nombre de Luis Espinal.
“Estamos aquí para expresar nuestro desacuerdo y ahora nos hemos enterado que se ha suspendido y estamos dispuestos a recibir las notificaciones que sean necesarias para conversar y dialogar”, declaró a Erbol.
Recordó que hace pocos días presentaron un memorial ante la Fiscalía de La Paz y esperan una respuesta porque la comunidad de los padres jesuitas rechaza el acto procesal programado.