Con 22 años, estudia en la prestigiosa academia de actuación Stella Adler, escuela de la que han salido actores de la talla de Robert De Niro, Martin Sheen, Mark Ruffalo, Benicio del Toro o Marlon Brando
REDACCIÓN/BOLINFO/TARIJA
(elPeriódico-diciembre 25/2016) Triunfar en Hollywood es un objetivo al alcance de muy pocos. Sin embargo, con trabajo, esfuerzo y las condiciones adecuadas ese reto casi utópico se torna más accesible. Es el caso del joven tarijeño de 22 años Vitorio Lema. De abuelos y padre tarijeños, Vitorio Lema nació en La Paz pero ha vivido la mayor parte de su vida en Tarija, hasta que se trasladó a Estados Unidos para comenzar a formarse en su carrera artística con el objetivo de triunfar en el mundo de la interpretación.
Tras su paso por el colegio tarijeño de la Salle, Vitorio tuvo su primer contacto con Estados Unidos gracias a un intercambio de estudios en la ciudad de Green Bay, en el estado de Wisconsin. Ese fue su primer contacto con el país norteamericano y donde se le abrieron las primeras puertas para empezar a pensar seriamente a formarse en interpretación.
Casualmente, uno de sus mejores amigos de la infancia se encontraba viviendo en Santa Mónica (Los Ángeles) por lo que se trasladó a estudiar a la ciudad californiana en el Santa Mónica College durante dos años.
Sin embargo, su inquietud por el mundo de la actuación nació en Bolivia cuando vio el rodaje de una película en la que participó su tío Virginio Lema. “Toda mi vida me ha encantado siempre actuar hasta que mi tío Virginio Lema me llevó a uno de sus rodajes que hizo y eso fue uno de los motivos. Dije: ‘Quiero estar aquí y quiero hacer esto para toda mi vida’”, señala en una entrevista con elPeriódico.
Tras el paso por Santa Mónica, Vitorio subió un escalón más y se mudó a la ciudad de Los Ángeles para formarse en la prestigiosa academia de actuación Stella Adler, escuela de la que han salido actores de la talla de Robert De Niro, Martin Sheen, Mark Ruffalo, Benicio del Toro o Marlon Brando.
“Los Ángeles es impresionante. Todas las premieres de las películas… todo está ahí. Cada día veo a actores, Hollywood es la industria más grande. Salgo a un bar a tomar una cerveza y te encuentras con productores. La música, la actuación, el teatro, todo… Está ahí. Además, Los Ángeles es gigante y tiene mucho contraste. El vivir allá, para mí que soy boliviano, me motiva mucho, me tiene en un 100 por ciento despierto”, apunta con una sonrisa y brillo en los ojos.
Justamente el ser boliviano, resalta, es una ventaja para él ya que le ayuda a ver las cosas desde otros primas y puntos de vista distintos a otros compañeros que han nacido en Estados Unidos. “A nosotros en Bolivia nos gusta aprender de todo. En Estados Unidos a ellos les gusta saber de ellos. Tienen mucho por supuesto, pero son más cerrados, en cambio en Bolivia, nosotros vemos de otros países. Me parece una ventaja increíble porque puedo ver las cosas desde diferentes puntos y simplemente experimentar. Me fascina observar, las diferencias y las diversidades”.
Pero a Hollywood no se llega sin trabajo por lo que de lunes a viernes e incluso muchos sábados y domingos los pasa en la academia practicando escenas y mejorando sus conocimientos. “Puedo estar de 8 de la mañana a 10 de la noche y al día siguiente lo mismo. Cada dos meses son 4 clases y nos dan dos o 3 escenas. He hecho mi primera obra hace 3 meses que gracias a dios me han dado el papel principal, que no me lo esperaba, pero me ha ido muy bien, ha habido criticas increíbles”, resalta con orgullo.
Esa obra que ha sido ya expuesta al público, se trata de una adaptación de Tim Kelly de la obra The Vampire. El personaje principal que interpreta Vitorio es un joven que va a estudiar a otro país y que por culpa de un vampiro se vuelve loco y adicto al opio.
La obra ha sido su primer gran paso en el mundo de la actuación y confía en que The Vampire sea solo el principio de una exitosa carrera.
“En la academia voy a terminar en agosto y me van a dar 6 meses para poder buscar trabajo. Mi meta para el próximo año es que me den uno o dos años más para vivir y si pasa eso le voy a meter con todo. He ido a casting y me ha ido bien. Me han dicho excelente pero cuando llega el momento de firmar el contrato me dicen: ¿dónde está tu número de seguridad? Un requisito imprescindible para poder a trabajar. Pero una vez, me concedan el permiso, espero hacer casting para empezar a empezar a filmar películas puesto que creo que filmando películas se abre mucho camino. Si me va bien me gustaría ir a estudiar a Europa, a México a Buenos Aires para continuar mi formación”, destaca.
Incursión en el mundo de la música
Además de su pasión por la interpretación, Vitorio confiesa ser un melómano, una pasión que se ha materializado hace unos meses en forma de banda: Suke.
Vitorio es el cantante de la banda Suke, un grupo de rock con toques psicodélicos e indies, compuesta por otros dos tarijeños que viven en Estados Unidos. Entre ellos su primo hermano, quien es ingeniero de sonido y ha aportado los equipos para grabar sus primeras canciones, y el también tarijeño Álvaro Lazcano, quien es el guitarrista.
“Hemos comenzado hace 4 meses y tenemos tres canciones que están en las redes sociales y esperamos lanzar nuestro primer álbum en febrero. La palabra Suke existe en Japón, pero para nosotros es una palabra con positivismo. Suke, lo utilizamos por ejemplo en frases como: ¿vamos a tomar, un asado? Suke. Es algo positivo, una afirmación porque en eso nos centramos”.
Suke tiene influencias de bandas como Soda Stereo, Pink Floyd, The Beatles o Gustavo Cerati. “Son canciones en inglés, pero también tenemos un plan de hacer música en español. El año que vamos a trabajar. Las canciones hablan en general de sentirse bien con uno mismo y sentirse bien con lo que es la vida. Es una vida y estamos de pasó pero hay que soñar y hacer lo que quieras. Eso en general. Y también las chicas, del amor que le tenemos a ellas, sino existirían ellas esto sería un caos”, comenta entre risas.
No obstante, si tuviera que optar por la música o el mundo de la actuación, Vitorio tiene dudas, aunque finalmente acaba apostando por la música. “Tengo un amor especial a la música, me encanta, pero si me das a elegir creo que elegiría la música. Aunque creo que si me va bien en la música también va ser más fácil en el mundo de la actuación. Le voy a meter a los dos con todo”, asegura sin vacilar.
El éxito de Vitorio el tiempo lo dirá sin embargo la convicción y la seguridad con la que expresa sus sueños son un primer paso para lograrlo. (eP)