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Raúl Castro encabeza este martes una ceremonia en memoria de su hermano, el ex dictador cubano Fidel Castro, quien falleció el pasado viernes por la noche.
El actual jefe de Estado rinde tributo al líder de la revolución cubana en un acto que congregó a miles de personas en la Plaza de la Revolución, en La Habana.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, fue el primero de 20 oradores. En su discurso destacó la «lucha» de Castro durante más de medio siglo y repudió a quienes «atacan» al régimen. «Cuba ha vivido una guerra permanente desde el inicio de la revolución (…) No han invadido Cuba porque saben que no lograrán vencer a todo un pueblo (…) Con el ejemplo de Fidel jamás el pueblo permitirá que su país vuelva a ser colonia de ningún imperio».
En la ceremonia oficial también se destacan las presencias de Nicolás Maduro (Venezuela), Evo Morales (Bolivia), Rafael Correa (Ecuador) y Daniel Ortega (Nicaragua), principales aliados regionales del régimen castrista.
Entre los jefes de Estado de América Latina también están presentes Enrique Peña Nieto (México), Juan Manuel Santos (Colombia) y Juan Carlos Varela (Panamá), entre otros.
Chile está representado por su ministro de Desarrollo Social, Marcos Barraza, y Argentina por su canciller Susana Malcorra.
Jacob Zuma, presidente de Sudáfrica, y otra decena de mandatarios africanos forman parte del acto oficial.
Este martes, el cuarto de los nueve días de homenajes, también arribó a La Habana para ser parte del acto el rey emérito de España Juan Carlos I, y Ben Rhodes, asesor del presidente norteamericano Barack Obama.
Las cenizas de Fidel Castro reposan en una urna de madera café que por primera vez fue exhibida por la televisión estatal la noche de este lunes.
La caja con los restos del líder revolucionario de la isla está en la sala Granma del Ministerio de las Fuerzas Armadas, al costado de la Plaza de la Revolución.
Allí, el presidente Raúl Castro rindió homenaje a su hermano en una ceremonia privada este martes.
Acompañado de los máximos dirigentes del Partido Comunista de Cuba, el mandatario guardó un minuto de silencio frente a la urna y firmó un juramento de lealtad a la Revolución, que encabezó junto a su hermano en 1959.
Este lunes cientos de miles de cubanos desfilaron por la Plaza de la Revolución para rendir tributo al líder de la isla. Sin embargo, los asistentes se sorprendieron al no encontrar los restos mortales del dictador, y desfilaron distribuidos en tres salas con una foto de Castro y parte de sus insignias militares.