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AGENCIAS
The Strongest y Bolívar terminaron resignados en el clásico paceño 202 de la historia al empatar 1-1 en el estadio Hernando Siles y seguir con la misma diferencia de puntos (28 celestes y 25 atigrados) en la pelea por el título del Apertura. La academia logró mantener la punta del torneo en un partido bastante emocionante en la cancha del escenario miraflorino.
El Tigre fue el que tomó la iniciativa en los primeros minutos, ensayando con remates de larga y media distancia con Veizaga, Castro y Escobar como los hombres que más peligro generaron sobre el arco del golero Diego Zamora, que tuvo bastante trabajo en la etapa inicial con buenas intervenciones para evitar la caída de su portería.
Los últimos 12 minutos del primer tiempo fueron los más emocionantes. Un tiro de esquina servido por Matías Alonso desde la izquierda, que vio mal colocado a Zamora, estuvo cerca de anotar pero el portero celeste logró despejar ayudado con Leonel Morales.
A los (38), Bolívar respondió a través de Juan Miguel Callejón que remató muy cerca del horizontal de Vaca. Después de esa acción, los de Beñat San José tuvieron otra chance, pero el palo derecho le dijo no al disparo de Leonel Justiniano.
El complemento arrancó sin mucha emoción, pero la temperatura empezó a subir, con un Bolívar que se animó con Juan Miguel Callejón que desde el sector izquierdo,  que se juntaba con Rudy Cardozo que ingreso por Leandro Maygua.  La apertura del marcador llegó tras una mal rechazo del portero Vaca y el español Callejón no desperdició el regalo, para notar de un remate de media distancia  a los (63) y rompa los 742 minutos que sin el anoten al guardameta atigrado.
Pero la alegría no duro nada, mientras los celestes festejaban, el gol de la igualdad cayó. Un tiro de esquina de Pablo Escobar desde el sector derecho y de cabeza sin marca; Diego Bejarano quiebre la oposición de Diego Zamora, mientras los rayos iluminaban el cielo paceño.
Con la igualdad en el marcador, la lluvia empezó a caer de manera intensa y eso perjudicaba el desempeño de ambos elencos que no podían controlar el esférico.