IGOR GUZMÁN/BOLINFO/TARIJA
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(elPeriódico- 9 de octubre) Un sujeto esta sindicado con otros dos sospechosos por estafa a una mujer, a quien le aseguraron ser funcionarios de la Aduana Nacional, y bajo ese título le quitaron con engaños 23.000 bolivianos y 7000 dólares con la promesa de venderle dos camionetas que supuestamente se encontraban en un depósito de la ciudad de La Paz.
De acuerdo al informado por fuentes policiales, se ha conocido que la víctima presentó una querella criminal en oficinas de la Fiscalía en contra de un sujeto por el delito de estafa agravada, quien le había asegurado a la denunciante que conocía a varios funcionarios de la Aduana Nacional que podrían ayudarle a adquirir dos camionetas modelos 2015 y 2016.
“Le hizo como el cuento del tío, que tiene a varias personas de la Aduana que conoce, que son y también a personeros del Gobierno, con quienes tomaría contacto para ayudarla a adquirir dos motorizados, por lo que el interesado viaja con uno de sus familiares a La Paz, donde se contactan con el denunciado y otras personas más quienes afirman que existen camionetas en oferta”, dijo.
Pero para poder adquirir estos motorizados de último modelo, los mismos deberían cancelar por adelantado 7000 dólares en una cuenta bancaria, lo que hacen, quedando luego que iban a ver los automóviles y ahí cancelarían todo para que les entreguen las camionetas, sin embargo esta tratativa fue incumplida y les obligaron a entregar 23.000 bs caso contrario perderían los autos.
“Por no perder su dinero, y quede todo en la nada le dieron (la plata), pero no les dijeron cuando les iban a entregar, por lo que la víctima les reclamo llamándoles, al cual contestaban diciendo que se estaban haciendo los tramites, pero después apagaron sus teléfonos, y nadie les contesta por lo que denunciaron el caso y ahora se está investigando”, señaló.
El Apunte
La Policía recomienda en estas situaciones, no realizar ninguna transacción bancaria sino está convencido de que lo que pretende comprar existe, así mismo deben verificar si es que la aduana en verdad está ofertando o vendiendo productos que son decomisados del contrabando con el fin de evitar una estafa como ocurrió en este caso.