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LEONEL SUAREZ Q./BOLINFO/TARIJA

(elPeriódico-agosto 23/2016) La Agencia Boliviana de Energía Nuclear (ABEN) llevó adelante ayer la socialización de los proyectos de tecnología nuclear para analizar los mercados existentes en Tarija para el emplazamiento de las obras que se gestionan desde el nivel central.

El técnico de la ABEN Luis Romero manifestó que la visita a Tarija tiene como objetivo establecer un nexo de comunicación entre la entidad a la cual representa, el Programa Nuclear Boliviano, y la población y enfatizó que esta socialización se llevará adelante en los otros departamentos, por lo que esperan obtener una mayor comprensión y aceptación de las iniciativas.

Romero señaló que desde el Gobierno se tiene previsto instalar tres proyectos, como el Centro Nacional de Ciclotrón-Radiofarmacia que permitirá el diagnóstico precoz del cáncer disminuyendo las incidencias de esta enfermedad; la Planta de Irradiación Gamma para el tratamiento de los productos de consumo y el  Reactor Nuclear de Investigación que servirá para contribuir a la liberación científica y tecnología por intermedio de la tecnología nuclear.

“Estos proyectos habrá que implementarlos en los lugares donde hay una necesidad identificada –añadió Romero-. Eso implicará que departamentos como Tarija, Cochabamba y Santa Cruz tengan sus propios medios para que no estén trasladándose hasta La Paz”.

En cuanto al reactor nuclear de investigación, Romero dijo que se tiene previsto capacitar al recurso humano científicos e investigadores.

Romero manifestó que se debe apostar por estas tecnologías, puesto que están probadamente demostradas  y se utilizaron en el planeta por más de 7 décadas por lo que llevarán consigo un aporte para el país.

El expositor de las charlas de socialización y experto del Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA), Miguel Alcérreca,  explicó que la Planta de Irradiación Gamma que funciona con material radiactivo utiliza fuentes de radiación ionizante y aclaró que una planta nuclear es para la generación de electricidad a través de la fisión del núcleo, mientras que la planta de irradiación se usa la inestabilidad del elemento radiactivo que se está volviendo estable por intermedio de un proceso de deliberación de energía.

Alcérreca manifestó que la planta de irradiación permitirá dar un salto tecnológico-científico en el área agroindustrial permitiendo a los empresarios diversificar su producción y la posibilidad de explorar nuevos mercados a nivel internacional.

Los servicios que prestará la planta de irradiación serán el tratamiento de alimentos u especias para la reducción de la carga microbiana prolongando su conservación, también permitirá el cumplimiento de normas de calidad requeridas para el almacenamiento en silos y exportación de excedentes de productos; y servirá para la esterilización de materiales para la industria médica y otros.

En cuanto a las condiciones que presenta Bolivia para encarar los proyectos, Alcérreca argumentó que el Gobierno mostró su interés y la capacidad de financiamiento para iniciar los proyectos, empero destacó que se debe hacer con la capacitación y formación de recursos humanos.

Alcérreca manifestó que todavía no se tienen definidos los sitios de emplazamiento de las plantas de tecnología nuclear, puesto que están sujetas a un estudio de factibilidad, lo que contemplará aspectos sociales, ambientales, financieros, comerciales, técnicos y regulatorios.

Miguel Alcérreca Sánchez es jefe del departamento del irradiador gamma del Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares de México desde el año 2007. Desde el 2009 formó parte del grupo de expertos internacionales del Organizamos Internacional de Energía Atómica (OIEA), para proyectos de tecnologías de radiación, además se destaca en otras áreas relacionadas.

Inversiones millonarias para las plantas tecnológicas

El experto del Organizamos Internacional de Energía Atómica (OIEA) Miguel Alcérreca Sánchez manifiestó que para la instalación de una planta de irradiación gamma la inversión oscila entre los 15 millones de dólares, en tanto para una planta con acelerador de electrones implica unos 10 millones de dólares.

Mientras que para un irradiador de investigación los gastos estarían oscilando entre los 300 mil dólares. Alcérreca aclaró que los gastos supuestos son para la infraestructura y equipamiento con la tecnología adecuada. Sin embargo hizo hincapié en que para la implementación de estas nuevas tecnologías se debe capacitar al recurso humano. (eP)