(INFOBAE) Usain Bolt asombra por su velocidad imbatible, pero también sabe muy bien darle al público que lo sigue un show a la altura de las expectativas. La semifinal de los 200 metros no fue la excepción para el corredor jamaiquino, quien protagonizó otro risueño acto con su escolta.
En su prueba preferida, sacó varios cuerpos de ventaja y firmó el mejor tiempo de las tres series con 19.78 segundos. El canadiense Andre De Grasse lo secundó en la semifinal y también en la tabla final de colocaciones con apenas dos centésimas más.
Más allá de la batalla por los números, también realizaron una divertida secuencia en los metros finales de la pista. Bolt bajó considerablemente su marcha para esperar que el canadiense quede a tiro. Mientras lo miraba de reojo, calculaba que no lo supere.
La secuencia se dio con la sonrisa cómplice de ambos mientras se preparaban para cruzar la línea de meta. Cuando finalmente consiguieron su cometido, el Rayo levantó su dedo índice moviéndolo para los costados diciéndole que no le había ganado mientras las risas dominaban los rostros de ambos.
Hoy jueves reeditarán esta pícara competencia, pero esta vez con las medallas en el medio.