(INFOBAE) Irak aprobó la pena de muerte contra 36 terroristas del Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) que masacraron a 1.700 prisioneros en junio de 2014, cerca de la ciudad de Tikrit.
En aquella matanza los yihadistas engañaron a las víctimas, haciéndoles creer que iban a regresar con sus familias, consigna Daily Mail.
Miles de soldados permanecieron en cautiverio de ISIS en el norte de Irak, cuando el grupo terrorista intentaba conquistar el país en 2014.
Luego fueron subidos a camiones con la promesa de que volverían a casa con sus familias. Sin embargo, los yihadistas los condujeron a orillas del río, donde fueron alineados en fila y asesinados a tiros. Las víctimas fueron enterradas en fosas comunes.
El presidente Fuad Masoum aprobó las ejecuciones después de que circularan imágenes que muestran la brutalidad de esos asesinatos.
Los cuerpos de los 1.700 soldados asesinados fueron descubiertos el año pasado por un equipo forense iraquí.