(INFOBAE) El canciller de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, acusó al gobierno de Michel Temer de querer «comprar el voto de Uruguay» para tratar de que se suspendiera el traspaso de la presidencia temporal del Mercosur a Venezuela a cambio de futuros acuerdos comerciales.
Según la versión taquigráfica a la que accedió el periódico uruguayo El País, el canciller señaló el miércoles, en la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara de Diputados, su molestia con el gobierno brasileño.
«No nos gustó mucho que el canciller (José) Serra viniera a Uruguay a decirnos -lo hizo público, por eso lo digo- que venían con la pretensión de que se suspendiera el traspaso y que, además, si se suspendía, nos iban a llevar en sus negociaciones con otros países, como queriendo comprar el voto de Uruguay», manifestó.
El mismo diario recuerda que, acompañado por el ex presidente Fernando Henrique Cardoso, Serra llegó a Uruguay el pasado 5 de julio para reunirse con el presidente Tabaré Vázquez y su par uruguayo.
En conferencia de prensa, Serra reveló que Brasil haría «una gran ofensiva» comercial en África subsahariana e Irán y quería llevar a Uruguay como «socio». A su vez, pidió al gobierno dejar en suspenso el traspaso de la presidencia del Mercosur a Venezuela.
De acuerdo al propio Nin Novoa, esta actitud «molestó mucho» a Vázquez. «El presidente se lo dijo clara y rotundamente: Uruguay va a cumplir con la normativa y va a llamar al cambio de la presidencia» del Mercosur, subrayó.
Brasil aseguró que el Mercosur decidirá «medidas jurídicas» contra Venezuela
El Gobierno brasileño aseguró que el Mercosur deberá decidir las «medidas jurídicas» aplicables a Venezuela, a quien acusa de haber incumplido de manera «unilateral» algunos compromisos esenciales en el proceso de adhesión al grupo.
Los miembros fundadores del Mercosur tendrán por delante «la compleja tarea de decidir las medidas jurídicas aplicables frente a esta realidad, indeseada por todos», señala un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil.
La Cancillería precisa que el Gobierno brasileño evaluará «detenidamente» en los próximos días la situación bajo «la luz del derecho internacional» y mantendrá la «debida coordinación» con Argentina, Paraguay y Uruguay.
El Ejecutivo lamenta que Venezuela «no haya tenido éxito» en sus «esfuerzos para cumplir los compromisos asumidos cuando firmó» el protocolo de adhesión al Mercosur, en 2006.
El Ministerio cita el incumplimiento de varios acuerdos por parte de Venezuela, entre ellos el protocolo de Asunción sobre el compromiso con la promoción y protección de los Derechos Humanos.
«El estudio exhaustivo de la situación» realizado el 13 de agosto «se finalizará con consultas a la Secretaria del Mercosur, que recoge las informaciones recibidas por Venezuela al respecto», resalta la nota.
El Brasil del presidente interino Michel Temer encabeza las gestiones para impedir que Venezuela asuma la Presidencia del Mercosur, que hasta ahora ocupaba Uruguay y le correspondería por orden alfabético al Gobierno de Caracas, que contaba con la aprobación de la gobernante suspendida Dilma Rousseff.
El pasado 29 de julio Uruguay anunció al resto de socios del Mercosur que finalizaba su mandato del bloque y consideró que no había «ningún impedimento jurídico» para que la asumiera Venezuela, pese a la opinión del resto de miembros del bloque, que se oponían alegando la situación política y de derechos humanos en el país.
A pesar de ello, cuando Uruguay anunció que dejaba la presidencia no comunicó la transferencia de la misma y simplemente señaló que ya no tenía el mandato del bloque.
Acto seguido Venezuela anunció que asumiría la presidencia, una decisión que dio inicio a una crisis entre los socios del Mercosur.