RÍO DE JANEIRO
La selección argentina de baloncesto le dio el sábado a sus hinchas lo máximo que éstos pueden esperar sin contar la medalla de oro olímpica: una agónica victoria 111-107 sobre Brasil tras dos tiempos suplementarios con la que consiguió el pase a los cuartos de final de los Juegos de Río de Janeiro.
Con el triunfo, Argentina (3-1) quedó en lo más alto del Grupo B con siete puntos, mientras que su vecino se hundió en la quinta posición entre seis equipos. La «albiceleste», oro en Atenas 2004, bronce en Pekín 2008 y cuarta hace cuatro años en Londres, dio un nuevo paso en pos de otra medalla.
En tanto, el subcampeón olímpico España renació el sábado y se alejó del abismo de la eliminación al conseguir una aplastante victoria 109-59 sobre Lituania.
El resultado dejó a Lituania clasificada con siete puntos y a España con seis, nuevamente en zona de clasificación.
Argentina parecía vencida cuando quedaba poco para el final del encuentro, pero un triple de Andrés Nocioni a 3,5 segundos dejó la contienda igualada a 85 en el tiempo reglamentario. Una vez allí, se vio superada por el local hasta los últimos minutos, en los que sacó una ventaja que terminaría siendo decisiva de la mano de un Facundo Campazzo soberbio.
Nocioni, con 37 tantos y 10 rebotes, y Campazzo, con 33 y 11 asistencias, conformaron una dupla letal y fueron las figuras del clásico sudamericano. Nene Hilario, con un goleo de 24, fue el más efectivo en el local, cuyo pasaporte a cuartos -con un triunfo y tres derrotas en su zona-, quedó muy comprometido.
Antes del inicio, los capitanes Marcelinho Huertas y Luis Scola, se dirigieron al público para pedir buen compartimiento, después de los incidentes registrados en los Juegos entre hinchas brasileños y argentinos en competiciones precedentes.
Argentina dominó el primer cuarto de la mano de Nocioni, que metió cuatro triples y estuvo bien secundado por Scola, para sacar ventaja de 28-19 ante un deslucido Brasil.
Pero todo cambió en el segundo cuarto. Sin Emanuel Ginóbili y Scola en cancha por varios minutos, el local se puso arriba en una ráfaga. Argentina erró demasiados tiros y se fue al descanso 50-42 abajo.
Tras el partido, Ginóbili dijo que Argentina logró una «victoria fundamental y memorable».
NOCIONI, GIGANTE
Al regreso, Nocioni volvió a aparecer, bien acompañado por Campazzo. Brasil se fue del partido por unos minutos y Argentina lo aprovechó para pasar a liderar el marcador. Pero el local reaccionó justo a tiempo para quedar en ventaja (72-67) al final del tercer parcial, gracias al corpulento Hilario, muy encendido debajo del aro argentino.
El último cuarto arrancó parejo, con ambos errando mucho. Cerca del final, la visita se puso a tres puntos con un triple de Campazzo. La diferencia se sostuvo y los hinchas brasileños se aprestaban a celebrar, pero el agónico triple de Nocioni rescató a Argentina y obligó al tiempo extra.
La primera prórroga terminó 95-95 luego de que Brasil desperdiciara una ventaja de seis puntos. En el segundo tiempo extra, Argentina hizo la diferencia pronto, con dos triples de Campazzo y dos tiros libres convertidos por Ginóbili sobre el cierre tras tomar un rebote, antes de que se desatara el festejo celeste y blanco en el rectángulo de juego y en las gradas.
Pau Gasol fue la gran figura en la victoria de España al sumar 23 puntos y cinco rebotes, mientras que Rudy Fernánez totalizó 13 puntos, un rebote y tres asistencias.
Por el lado de la desdibujada Lituania, Mindaugas Kuzminskas cerró con 17 puntos, cuatro rebotes y dos asistencias.