(ABI).- El presidente Evo Morales aseguró el lunes por la tarde que hasta 2020 la industrialización en Bolivia se fortalecerá con la futura producción de urea y amoniaco, litio y energía eléctrica.
«Hasta el 2020 el proyecto de industrialización se fortalecerá con la producción de urea y amoniaco, litio y mayor exportación de energía», escribió en su cuenta twitter: @evoespueblo.
Actualmente, la edificación de la planta de urea y amoniaco, en el departamento central de Cochabamba, está en la etapa final y se financia con 862,5 millones de dólares, la inversión más alta registrada en la historia de Bolivia y está a cargo de la empresa coreana Samsung Engineering Co. Ltda.
Según información oficial, hasta junio se registró 92 % de avance físico y su conclusión está garantizada para el 30 de noviembre de este año.
Los fertilizantes obtenidos en esa planta, unas 2 mil toneladas por día, proveerán nitrógeno a los cultivos de soja, maíz, arroz, papa, girasol, trigo y caña de azúcar, entre otros, además de mejorar la calidad de los productos agrícolas.
El 20 % de los productos de la planta de amoniaco y urea servirán para mejorar la agricultura del mercado interno y el 80 % será exportado a países de la región, para que genere cerca de 200 millones de dólares anuales en ingresos para el país, de acuerdo con las proyecciones oficiales.
Asimismo, Bolivia apunta a producir alrededor de 50.000 toneladas de carbonato de litio a escala industrial, grado batería, desde el último trimestre de 2018
El incremento del precio internacional del litio coloca a Bolivia con una buena perspectiva, tomando en cuenta que posee 80% de las reservas del mundo.
El litio es uno de los principales componentes para la fabricación de baterías para teléfonos celulares, computadores portátiles y otros dispositivos electrónicos, según los expertos.
Otra de las metas de Bolivia es la exportación, hasta 2025, de al menos 10.000 megavatios de electricidad a los países vecinos y generar una renta mayor a la que percibe el país por la venta de los hidrocarburos, para consolidar el sueño de convertirse en el centro energético de Sudamérica.
Para ese objetivo, el gobierno de Morales ejecuta grandes inversiones para la construcción de plantas hidroeléctricas, geotérmicas, eólicas y fotovoltaicas.
Entre ellas, la más importante es el proyecto del complejo hidroeléctrico de El Bala, que prevé generar cerca de 3.600 megavatios de energía eléctrica y convertir al departamento de La Paz en el principal exportador de electricidad de Bolivia.