(INFOBAE) La Defensa Civil siria, un grupo de voluntarios que desarrolla labores de rescate, denunció hoy un supuesto bombardeo con sustancias químicas perpetrado este lunes por la noche en la población de Saraqeb, en el este de la provincia septentrional siria de Idlib.
Un responsable de los también conocidos como Cascos Blancos, Mayed Jalaf, que se trasladó a esa localidad, dijo a EFE por teléfono que sobre las 11:00 PM horas local (8:00 PM hora GMT) «hubo un bombardeo con gas cloro en la ciudad de Saraqeb».
En un comunicado, la Defensa Civil precisó que un helicóptero arrojó dos barriles que contenían cada uno cinco botes de cloro y bolas de hierro de distintos tamaños.
La nota agregó que al menos 33 civiles fueron afectados por el gas, entre ellos diez menores y dieciocho mujeres, y que el estado de tres personas es «grave».
La organización publicó un vídeo en el que se ven a varios hombres con dificultades para respirar y que son atendidos con máscaras de oxígeno.
Este bombardeo en Saraqeb se produjo después de que un helicóptero ruso fuera derribado ayer por combatientes en esa zona, aunque la acción no fue reivindicada por ninguna organización.
El Kremlin dio por muertos a los cinco tripulantes del helicóptero Mi-8 alcanzado en Idlib cuando regresaba a su base tras llevar ayuda humanitaria a la ciudad de Alepo, siempre según Moscú.
La muerte de 12 personas a causa de una serie de ataques de aviones rusos fue de denunciada este martes por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que agregó que entre las víctimas hay dos niños.
La zona cercana a la base aérea de Abu Dhuhur fue la zona en la que se produjo la ofensiva, como respuesta al derribo de un helicóptero Mi-8 ruso que dejó cinco militares muertos en la jornada del lunes. El gobierno de Vladimir Putin aseguró que estaba en misión humanitaria cuando fue abatido.
Fuentes de las milicias rebeldes dijeron haber contabilizado 33 ataques aéreos desde que se conoció el incidente del Mi-8, el peor en cuanto a víctimas rusas desde que se inicio su intervención en la guerra civil.
Corredor humanitario
Decenas de familias abandonan el este de la ciudad siria de Alepo, cercado por el Ejército nacional y bajo el control de la oposición, a través de uno de los corredores humanitarios habilitados por las autoridades, según la agencia de noticias oficial SANA.
La fuente explicó que los civiles salieron de los distritos orientales de la urbe a través del paso de Al Sheij Said, en el sur de Alepo.
Además, varios combatientes se rindieron y entregaron sus armas a las fuerzas gubernamentales para regularizar su situación en virtud del decreto emitido la semana pasada por el presidente sirio, al Assad, que ordenó un indulto a los guerrilleros que dejen la lucha armada.
El 27 de julio, las Fuerzas Armadas sirias confirmaron que habían impuesto un cerco total a los barrios orientales de Alepo, donde se estima que viven entre 200.000 y 300.000 personas, tras el corte de todas las vías de suministros.
Un día después, Rusia, aliada del Gobierno de Damasco, anunció el inicio de una operación humanitaria en Alepo, en colaboración con el Ejército sirio, con la apertura de corredores para que los civiles puedan abandonar la ciudad y los guerrilleros que lo deseen depongan las armas.