Noticias El Periódico Tarija

(ERBOL) Una supuesta reunión se perpetuó entre el ministro de Trabajo, Gonzalo Trigoso y el dirigente de los discapacitados en La Paz, Jorge Flores. Pese a que ambos fueron vistos entrar y salir de las oficinas de esta cartera de Estado, tanto la autoridad como el representante del sector negaron el encuentro.


“Normalmente, en el Ministerio de Trabajo trabajamos sábado y domingo y a eso obedece mi presencia. Hemos estado con funcionarios del área fiscal para evaluar el tema Enatex. Un reunión con las personas con discapacidad, por lo menos en mi caso, no, no me he ruñido”, aseguró Trigoso al salir de su oficina.

Después de estas declaraciones, los periodistas notaron que Flores salía por la puerta de atrás, por lo que micrófonos y cámaras en mano lo persiguieron para conseguir su versión del hecho.

“Nadie ha firmado nada, no he firmado nada”, dijo Flores y se alejó molesto. Sin embargo, poco después, el dirigente accedió a hablar con la prensa.

“Yo estaba pasando, no estaba haciendo ahora, me han llamado de la dirigencia nacional a una reunión y estaba subiendo, pero me han llegado amenazas de muerte y entonces me he asustado y me empezado a ir, es por eso que me he ido, pero no me reunido”, aseveró Flores.

Ante la consulta de las razones sobre su presencia en el Ministerio de Trabajo, Flores dijo que “no he entrado, sólo estaba pasando por el lugar, pero ni he entrado”.

Analizan posible desvinculación de la movilización

Asimismo, Flores señaló que existe un descontento por parte de las personas afiliadas a la Federación Departamental de La Paz, por lo que se analiza que se podrían desvincular de la vigilia y abandonar las movilizaciones.

“Tenemos muchas razones para poder separarnos de la caravana, no lo estamos haciendo por honor a las bases, pero hay muchas razones y esta semana se va a llevar adelante un ampliado departamental y se va decidir, ya tenemos el voto resolutivo de las provincias, así que vamos a decidir”, afirmó.

Según Flores, los discapacitados de La Paz que participan de la vigilia que exige al Gobierno, un bono mensual de 500 bolivianos, sufren de maltratos y abusos por parte de los representantes y movilizados de otros departamentos.

De acuerdo con su versión, los discapacitados a nivel nacional, no los toman en cuenta en las reuniones, ni los hacen partícipes de la olla común a la hora de alimentarse, además de que existiría una supuesta malversación de fondos de los recursos de la vigilia.

“Estamos preparando una nueva propuesta (…) Vamos a insistir en el bono de 500 bolivianos (…) Si el Gobierno llama a la Federación de La Paz a dialogar, yo sí, voy a asistir”, finalizó Flores.