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DANIEL RODRÍGUEZ/BOLINFO/TARIJA

(elPeriódico – julio 08/2016) El reciente conflicto entre la Central Obrera Boliviana (COB) y el Gobierno nacional por el Decreto Supremo que cierra la empresa textil Enatex parece que caló profundo en la alianza que sostenían ambos sectores. En este sentido, desde la dirigencia de Tarija se habla otra vez de la idea de crear el Partido Trabajador (PT) y la propuesta será elevada en el siguiente congreso nacional.

El secretario de Prensa y Propaganda de la COD, Edwin Orgaz, informó que es hora de definir la existencia de un brazo político que maneje el tema y para ello considera importante la celebración de un congreso para concretar de ahora en adelante el accionar político de la Central Obrera.

“Es necesario un partido político de la COB, antes no porque se decía que la Central Obrera tiene que tener su  independencia política pero eso se ha tratado de tergiversar –dijo Orgaz-. Hubo una afinidad de principios con el Gobierno pero ahora nos hemos dado cuenta de que tampoco es así y tiene que tener (la COB) una definición política partidaria”.

El dirigente recordó que la COD en Tarija entró a la Coordinadora Departamental del Cambio (Codelcam) como invitado, pero la gente del Movimiento al Socialismo (MAS) observaba su presencia. Por ello, cree que lo mejor es apoyar con otra instancia política y fortalecer el proceso de cambio.

“Dicen que la COB se aleja del proceso de cambio, pero en realidad nosotros somos el proceso de cambio porque iniciamos desde hace tiempo atrás y si no hemos tenido la capacidad de poner a un dirigente obrero en la presidencia es otro tema –aseguró Orgaz-. Si obramos sindicalmente hay derecho a discernir pero si hablamos políticamente hay una estructura  y eso debe normarse. Por ello, se planteará el tema en el congreso y se prepara la idea”.

 Analista dice que el pueblo ya no cree en la COB

 El analista político Iván Arias explicó que cuando empezó el conflicto, y la COB se subió a una causa por el desempleo de empresas estatales y privadas, entonces nació un sentimiento general de que las cosas no están bien y empezó la protesta.

“La pregunta es que si los dirigentes iban a generar un sindicalismo independiente  y autónomo del Gobierno o más bien iba a ser para buscar más prebendas, más sedes y más vehículos, y en el futuro un ministerio –afirmó Arias-. Los resultados mostraron que esta dirigencia es de prebenda y se olvidaron de los discapacitados”.

En este sentido, para el analista querer hablar de un partido político en esas condiciones no tendrá credibilidad en la gente. Por consiguiente, Arias sugiere a la COB lavar su imagen por haber sido incondicional del Gobierno.

“La clase obrera se entregó de manera abierta al régimen, ni siquiera en los  tiempos más importantes la COB fue tan sumisa al poder –señaló Arias-. Juan Lechín Oquendo siempre mantuvo la COB con un grado de independencia, pero los actuales dirigentes se entregaron al Gobierno. No supieron conducir esta protesta  y será difícil ganarse la simpatía de la gente con un nuevo partido político”.

Según Arias, la COB debe recuperar sus banderas de independencia y de reivindicaciones sociales a favor de los trabajadores. También debe volver a nacer porque perdieron su esencia ya que se volvieron un “apéndice del poder”.

“Se esperaba que de este conflicto surja un liderazgo pero volvieron a reunirse con el presidente Evo Morales y dejaron solos a los discapacitados”, apuntó Arias.

Preocupación en la izquierda

 El ex jefe del MAS en Cercado, Nelson Aguilar, manifestó la preocupación que existe en los sectores de izquierda por la situación en la relación COB-Gobierno porque hay dirigentes que  tienen la visión de fundar partidos políticos.

“Se luchó para que la Central Obrera esté dentro del MAS y por eso ahora tienen una cartera. Lo fundamental es que no se salgan de este proceso. Pueden existir discusiones o discrepancias pero ellos deben continuar en el proceso de cambio –aseveró Aguilar-. El proceso de cambio es de los bolivianos y  la Central Obrera debe ser parte de la construcción colectiva porque divididos no se podrá hacer nada. Hay que encontrar soluciones”.

Según Aguilar, el gran perdedor de la creación de un partido obrero sería el pueblo boliviano porque las organizaciones se dividirán y se hará un “grueso favor” a la derecha.

“La Central Obrera debe ser parte del proceso de cambio junto con los obreros, campesinos, intelectuales de la clase media, entre otros, juntos deben construir la nueva Bolivia –concluyó Aguilar-. De apoco se retorna al neoliberalismo con personas que quieren retroceder con transnacionales y la privatización. Por eso, hay que preservar el reencuentro COB-Gobierno para profundizar el proceso de cambio y la COD debe hacer una evaluación autocrítica”. (eP)