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(julio-07/2016) El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, consideró ayer que «ya se comienza el desmonte del aparato de la guerra» con las FARC después de que esta guerrilla haya decidido dejar de extorsionar a la población para financiarse.
«Ya se comienza el desmonte del aparato de la guerra», apuntó el mandatario durante el lanzamiento de la Estrategia de Mejores Prácticas de Buen Gobierno en Bogotá, donde declaró que el fin de la extorsión es «muy importante».
Dejar las extorsiones fue una orden dada a conocer el martes por el máximo líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño Echeverri, alias «Timochenko», quien se mostró confiado además en firmar pronto la paz con el Gobierno de Santos, con el que negocia desde hace tres años y medio.
Que se deje de recaudar el llamado «impuesto guerrillero» es para Santos «un paso muy importante hacia una situación de paz y de tranquilidad», que espera consolidar en próximas semanas con un acuerdo definitivo que ponga fin al más de medio siglo de conflicto armado.
El presidente subrayó que las FARC «no habían aceptado» hasta ahora dejar de extorsionar a civiles porque «esa es la una de las formas que ellos decían que tenían que financiarse».
Durante el evento de la Estrategia de Mejores Prácticas de Buen Gobierno el jefe de Estado hizo un llamado a los 500 mandatarios locales y regionales presentes para que observen que las FARC cumplen su compromiso y garanticen que ningún colombiano «sea forzado nunca más a poner dinero para la guerra».
Detención
Santos anunció también la detención de «El Loco», un importante guerrillero en la estructura del Ejército de Liberación Nacional (ELN), quien habría sido responsable del asesinato de dos policías en Nariño.
«Con contundencia contra el crimen, capturado ‘El Loco’ del ELN, responsable de asesinato de policías en Nariño», manifestó el presidente de Colombia a través de su cuenta de Twitter.
Alias «El Loco», cuyo nombre de pila no fue revelado, fue capturado en el municipio de Bocas de Satina, en el departamento de Nariño, al suroeste de Bogotá.
Al guerrillero se lo acusa de haber estado detrás del asesinato de dos policías el 15 de febrero en Nariño.
Por otra parte las autoridades confirmaron que en la zona de Arauquita, al noreste del país, dos militares resultaron heridos con explosivos por parte de miembros del ELN.
En los últimos días el grupo guerrillero ha incrementado los ataques y hostigamientos en diferentes regiones del país y ha causado la muerte de varios militares y policías.
Tras los recientes ataques de los rebeldes, Santos ordenó a las fuerzas militares y a la policía «seguir combatiendo a esta organización con toda la contundencia posible».
El ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, hizo un balance de los enfrentamientos con el ELN, en los que han muerto 21 militares y 76 resultaron heridos. (eP)