IGOR GUZMÁN/BOLINFO/TARIJA
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(elPeriódico-21 de junio) Taxistas se sienten inseguros tras conocer la libertad de Fernando Arostegui, quien ayer fue beneficiado con las medidas sustitutivas dadas por el juez de instrucción cautelar segundo en lo penal Luis Ortiz, tras ser encausado por el delito de amenazas, tipificación menor a lo que la parte de la víctima fundamento en su denuncia.
El abogado Rubén Pérez Ch informo que ayer en la tarde en el juzgado cautelar, Arostegui salió con medidas sustitutivas luego de ser cautelado, a pesar de haberse fundamentado la alta peligrosidad que representaría este individuo para la sociedad. Quien según Pérez intento matar de un balazo en la cabeza al afectado.
“El imputado se encontraba en estado de ebriedad, tal es así que una vez que llama al móvil juan XXIII lo llama para que se acerque a la puerta, entra adentro saca una revista, le dice que la lea y al poco rato sale diciendo a quien le dices, ¡mi amor!, a quien le dices ¿mi amor?, yo mate a más de una persona, crees que no te puedo matar, te voy a matar sino te vas”, relató el jurista.
Luego de sufrir el amedrentamiento, el chofer arranca su auto y trata de huir, pero a una cuadra se planta, y el agresor hace el disparo arriba. Por lo cual luego interceden sus compañeros, policías y fiscal que ordena la aprehensión del amenazador.
Garantías insuficientes
Para la victima las medidas sustitutivas son insuficientes ya que este sujeto al estar libre, podría tomar venganza ya que esta persona seria una persona agresiva, e incluso su misma familia, ya que pasados días intento asesinar a su hermana a quien le produjo lesiones en la mano con arma blanca.
El Apunte
En el proceso investigativo al momento la policía y fiscalía continúan con las averiguaciones, ya que se laboratorio de criminalística, tiene la tarea de hacer la absorción atómica y el guantelete del casquillo del proyectil, el cual será analizado para conocer si el disparo en reciente.
Así mismo se pretende saber dónde está la pistola, la cual saco en una bolsa a ocultas la mujer sindicado llevándola a una tienda, y volver después a su casa con una Coca Cola.