AGENCIAS
Corría el minuto 74 del partido entre Brasil y Perú que definía cuál de los dos equipos clasificaba a los cuartos de final de la Copa América Centenario cuando Andy Polo por fin pudo eludir a Filipe Luis y sacar un centro venenoso para un Raúl Ruidíaz que solo tuvo empujar la pelota al fondo del arco. El árbitro uruguayo Andrés Cunha señaló el mediocampo y todo el plantel de Ricardo Gareca salió a festejar, pero el línea llamó al juez y comenzó el escándalo que duró tres minutos y 20 segundos porque Cunha no se decidía si el gol fue legítimo o no ya que no quedaba claro si Ruidíaz empujó la pelota con la mano o con su muslo. Finalmente el gol se convalidó, a pesar de haber sido claramente con la mano, y Perú terminó festejando un triunfo histórico.
Tras el partido, el autor del tanto no quiso saber nada con una supuesta polémica: “Contento por el paso que hemos dado. El gol fue una jugada muy rápida que me choca en el muslo. No entiendo por qué tanta polémica”.
Para cerrar, Ruidíaz se refirió al encuentro de cuartos de final ante Colombia: “Se viene un partido difícil pero bueno, ahora estamos contentos porque es una alegría para todo el país”.