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Gastón Cornejo Bascopé

Bosquejo una breve reseña de antecedentes personales del Gral. Carlos Blanco Galindo hasta 1925, quien, luego de ganar una formación profesional dignísima como Licenciado en Derecho, militar especializado en artillería en Argentina, Fontenebleau y Le Mans en Francia, con el grado de Coronel y es Concejal del Municipio en Cochabamba. Tenía gran prestigio el año en que debía concluir la gestión del presidente Bautista Saavedra, quien manejaba a su arbitrio el gobierno, caracterizado por la arbitrariedad, la persecución política y el exilio de innumerables bolivianos, enemigo de las figuras notables como la del personaje que honro en el recuerdo.

En marzo de ese año el Ministro de Comunicaciones Adolfo Flores, informa al Presidente Saavedra, denunciando que Alfredo Jáuregui Rosquellas, agente revolucionario en Sucre, habría conferenciado con el Cnel. Carlos Blanco Galindo lo cual constituía un “peligro entre civiles y militares que irán hasta la subversión a favor de Salamanca”.

El 14 de abril, Saavedra le envía una amenaza “Coronel. Gobierno encomienda a Ud. Comisión eminentemente patriótica resguardar las fronteras del país. Ud. excusa  prestar servicios para en cambio entregarse a otro género de actividades que no son propias del militar que alardea de honor y disciplina. Le notifico que si usted no sale el 20 sobre Santa Cruz, haré dar una orden especial por el Estado Mayor dándole de baja, por entregarse a trabajos de conspiración. Le llamo a usted la atención sobre la gravedad de su conducta. Además debo expresarle que le haré seguir juicio militar respectivo. B. SAAVEDRA.”

La respuesta. “Presidente República. No acepto los términos de su telegrama ofensivos para un conscripto y con mayor razón incalificables para un jefe militar de graduación superior, que no ha rehusado sus servicios al país, como consta en el Ministerio de Guerra. No he tenido participación política ni subversiva, porque creo que el Ejército no debe inmiscuirse en política, su misión es más noble. Su telegrama demuestra que la comisión que acepté, no es patriótica sino una forma disimulada de confinamiento. En consecuencia, deposité hoy en la Mayoría de Plaza mi solicitud de retiro en las condiciones que la Ley me otorga. Al retirarme con sentimiento del Ejército, como Boliviano ¡Reclamo de Ud. la libertad de mi Patria! Coronel Blanco Galindo.”

El Coronel Carlos Blanco Galindo fue Delegado Nacional en el Oriente de Bolivia, pero un año después, el 14 de abril de 1926 a enero 1927, durante el Gobierno de Hernando Siles. Fundó y rescató el Puerto de La Gaiba, consolidó toda la frontera desde Puerto Suárez a Roboré; exploró el Chaco Boreal enviando al Gobierno un Informe totalmente negativo para una confrontación bélica. Cuando la Revolución constitucional del 30 echó a Hernando Siles por prorroguista junto el arbitrario Hans Kundt, la Junta Militar y el pueblo lo eligieron Presidente de la nación, constituyendo un gobierno de honor en la historia de Bolivia.

Eran otros tiempos aquellos. Tan verticales y de política insana como los actuales, pero al parecer entonces había verdadero patriotismo, sana concepción de independencia militar del trajín político-partidario, acendrado orgullo de la profesión militar (“misión más noble”): y sobre todo, respeto a la dignidad personal y valentía ante la soberbia entronizada. Hoy la Patria ha desfigurado el rostro y requiere una cirugía reconstructiva.

Cochabamba, mayo 2016