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Como resultado de un análisis técnico, productivo y económico, la Empresa Pública Nacional Estratégica de Textiles (Enatex) se cerrará para convertirse en un Centro de Servicios Tecnológicos para la industria textil que operaría dentro de 60 días. Se prevé despidos del personal, informó el domingo la ministra de Desarrollo Productivo, Verónica Ramos.
Durante una conferencia de prensa, la titular de Producción y Economía Plural señaló que Enatex transformará su naturaleza jurídica para convertirse en una entidad pública descentralizada. «Garantizamos los beneficios sociales y en función de los requerimientos construiremos la nueva figura jurídica”.
Ramos no precisó a cuánto ascenderá el monto que se utilizará para las indemnizaciones sociales de los trabajadores que serán despedidos, ni cuántos se quedarán sin empleo.
«Enatex ya no haría prendas de vestir porque dejaría de existir”, dijo Ramos a tiempo de asegurar que se deja una empresa saneada que dio empleo por varios años, pero que requiere readecuarse a los mercados actuales y a la dinámica de producción.
Cabe recordar que la empresa de textiles atravesó por una fuerte crisis económica desde la gestión 2014, no pudo solventar ni siquiera su planta de personal. De ahí en adelante se intentó mediante algunas campañas levantar la producción, pero sin resultado alguno.
