GONZALO BURGOS/BOLINFO/TARIJA
(elPeriódico – abril 26) La Universidad Autónoma Juan Misael Saracho está atravesando una crisis financiera ya que existe un déficit significativo y se corre el riesgo de que a futuro esta casa de estudios ingrese en la franja roja por lo que se teme que de no solucionar sus problemas económicos tenga que cerrar.
Esta situación no solo es en esta universidad, ya que la Universidad Técnica del Beni, la Universidad Amazónica de Pando, la Universidad Siglo XX y la Universidad Técnica de Oruro, también se encuentran cerca dentro esta franja roja y posiblemente se cierren en los próximos meses.
Estas cuatro casas de estudio no tienen recursos para gastos corrientes lo que dificulta su sostenibilidad ya que lo peor es que no tienen ni para pagar el servicio de agua y la luz.
Jorge Bladés, rector interino de la Universidad Autónoma Juan Misael Saracho, dijo que se analizó esta situación en la Décima Conferencia Nacional de universidades, realizado en la ciudad de Trinidad en la que se determinó presentar la demanda al Gobierno Nacional de manera conjunta.
Para ello se conformó una comisión integrada por técnicos del Comité Ejecutivo de la Universidad Boliviana y algunos economistas de la Universidad de San Andrés para enviar un solo punto que trata sobre el presupuesto de las universidades estatales. Esta fue aprobada de manera conjunta.
“Esta decisión es porque el Gobierno nacional lo que hace es reunirse primero con las universidades grandes y luego deja al resto en una situación más complicada”, señaló.
Dijo que en los próximos días llegará una comisión por parte del Gobierno que estará conformada por técnicos del Ministerio de Economía y Finanzas, para hacer la revisión in situ de la parte financiera de cada universidad.
La propuesta de esta asamblea deberá ser lo más antes posible, ya que el tiempo es corto y este pueda ser antes del diez de mayo. Se está viendo la posibilidad de encontrar una solución.
El déficit que atraviesa la universidad oscila alrededor de los 30 millones, este monto se vienen manejando desde el año 2010, los cuales son seis años que se arrastra este dificultad. Esta deuda que conlleva la casa de estudio superior de Tarija, repercute negativamente en su normal desenvolvimiento. (eP)
