Noticias El Periódico Tarija

Alfredo Colque Machicado
Economista Máster
en Economía del Gas
y Petróleo

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Si bien el mercado laboral en Tarija está bastante más competitivo, no necesariamente esto se debe a que existe una gran demanda laboral, más bien todo lo contrario, ya que cada vez es más común que la administración pública despida a gran parte de sus trabajadores incluso a aquellos que han hecho carrera administrativa en la misma, como viene sucediendo con estas nuevas administraciones del Gobierno Municipal y Departamental. Y si bien existe una crisis económica generalizada, no estoy de acuerdo en creer que la solución a este problema es eliminar al único vehículo del circulante de los recursos económicos públicos (el trabajador), más aun cuando este ha venido haciendo carrera en la administración pública gracias a sus habilidades técnico profesionales y no políticas, pero más allá de esto existe un cuestionamiento generalizado contra diversas administraciones públicas a nivel regional debido a la escasa profesionalización y la excesiva burocracia e inoperancia de funcionarios de alto y bajo rango, esto debido a intereses más políticos que ligados al bien común, provocando una deficiente gestión en los tres niveles de Gobierno.
Esto ha producido que crezcan las dudas sobre qué está haciendo mal la autoridad electa a la hora de seleccionar a los servidores públicos, pero también la necesidad para mejorar, incorporando en la administración pública a los mejores hombres y mujeres con perfiles más técnicos y profesionales y no político partidarios.
Un dato que comparto con ustedes, es que en la mayoría de los países desarrollados, para los más jóvenes en general es mucho más atractivo trabajar en una empresa privada que pública, donde para crecer no hay límites ni techo, dado las oportunidades que ellas les entregan, todos lo contrario sucede en aquellos países como el nuestro, donde el principal objetivo del joven profesional es la administración pública, pese a que es de conocimiento común que el crecimiento profesional en la administración pública es más lenta, aunque económicamente más segura, peor aun cuando lo que más prima es el aval político y no la capacidad técnica o profesional.
Esta pregunta, que es más un desafío se las hago a nuestras autoridades legislativas en los tres niveles de gobierno, será posible trabajar en una ley para implementar un sistema a nivel municipal y departamental, en busca de perfeccionar la gestión y la probidad de los empleados públicos de estos niveles de gobierno subnacionales, entendiendo que la política debe ser para los políticos y la administración pública para los expertos en la gestión y administración del Estado.
Pero para que esto ocurra al menos en nuestro departamento el interés de las autoridades electas del sector público en los tres niveles de gobierno deberían ir de la mano para tener el éxito que ha tenido la empresa privada que maximizan su rentabilidad, las empresas privadas más exitosas han generado una serie de iniciativas muy creativas e innovadoras orientadas a mejorar su gestión, muchas de esas experiencias pueden ser implementadas en el sector público y generar un impacto muy positivo, una de esas puede ser mejorar las condiciones salariales, para que este (el trabajador sobre todo del nivel técnico) pueda dar más de lo que tiene y sabe y no este constantemente frenado, con un pie en el acelerador y otro en el freno por estar mal pagado.
Para esto será necesario incorporar en la administración pública a los mejores en habilidades y competencias, o caso contrario las autoridades electas de los tres niveles de Gobierno deberán trabajar estrategias para transformar a los servidores públicos en trabajadores más proactivos, creativos e innovadores, en personas muy decididas y firmes en sus determinaciones, empáticos con el resto, espontáneos, que posean inteligencia emocional, capacidad de innovar e iniciativa, junto con saber trabajar bajo presión y con integridad moral, adaptabilidad al cambio, mayor rigurosidad y orden, apego a normas y procedimientos, es decir un trabajador con vocación de servicio público.
Tal vez estoy pidiendo peras al olmo, aun cuando se sabe que las instituciones públicas, lamentablemente están regentadas por políticos que en la mayoría de los casos persiguen fines distintos al bien común, sin embargo con esta reflexión, quiero llegar al líder, aquel que ha sido electo para asumir estos retos y cambios que son necesarios de cara a tener una institución pública eficaz y eficiente al servicio y beneficio de la gente que es a quien se debe. Posiblemente para esto lo primero que se debe resolver es que tipo de trabajador queremos en la administración pública servidores con perfil profesional técnico o político.