LEONEL SUAREZ Q./BOLINFO/TARIJA
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(elPeriódico-Mar 07) En un trabajo realizado por estudiantes de la Universidad Privada Domingo Savio (UPDS), de la materia de Derechos Humanos, se pudo constatar que se vulneran los principales derechos de los privados de libertad de la cárcel de Morros Blancos. Incluso algunos reclusos denunciaron que existe abuso de autoridad por parte de los policías que resguardan el centro penitenciario, además que todavía persiste el ingresos de bebidas alcohólicas para algunos reos.
Según la Ley de Ejecución Penal y Supervisión, los privados de libertad gozan de algunos derechos dentro del recinto penitenciario, como el de recibir atención médica, una alimentación adecuada, asesoramiento jurídico, capacitación para ser reinsertados en la sociedad una vez cumplida su condena.
En ese sentido, para conocer si se cumplen o vulneran estas disposiciones legales, se realizó una visita al centro penitenciario Morros Blancos. Pero a través de las quejas de los reos entrevistados y los datos proporcionados por la Dirección Departamental de Régimen Penitenciario existe un hacinamiento de aproximadamente 406 personas, de las cuales son 19 mujeres y 387 varones, mismos que conviven en una cárcel con capacidad para 220 internos.
Sentenciados y preventivos
Por otro lado, se pudo conocer que de los 406 reos, en varones solamente existen 188 con sentencia ejecutoriada y 199 con detención preventiva; mientras que en damas, solamente 7 tienen medidas preventivas y son 12 sentenciados.
Uno de los reos entrevistados, de iniciales M.J. dijo que ya lleva más de 4 años con detención preventiva, puesto que no se le pudo comprobar el hecho, y está a la espera de su audiencia para salir.
Ingresan bebidas alcohólicas
Otras de las situaciones irregulares que se pudieron conocer, es el ingreso de bebidas alcohólicas para algunos de los reos, lo que en ocasiones provoca enfrentamientos entre los privados de libertad por estar bajos los efectos del alcohol.
“A veces se toman, se pelean, los llevan a un lugar que se llama el Chonchocorito, es feo para ellos, muchas veces dicen que van de noche, le pegan los policías, les echan gas –manifestó M.J.- Esto sigue ocurriendo, por ejemplo hasta los jóvenes que son encerrados en la Torre se los hecha gas”.
Reinserción social
La Ley de Ejecución Penal y Supervisión indica que se debe capacitar a los privados de libertad en diferentes rubros, para su respectiva reinserción social una vez que salgan del centro penitenciario, sin embargo en la cárcel de Morros Blancos se evidenció que los reos carecen de motivación para ser preparados, por lo que son pocos los que deciden tomar algunos de los cursos que se brindan en el reclusorio.
Uno de los testimonios recogidos del recluso F.G. fue alentador para la comunidad carcelaria, puesto que explicó que en la correccional pudo prepararse en distintas áreas, entre ellas: carpintería, sastrería corte y confección, computación, entre otras ramas. Y que todo esto depende de los que quieren superarse.
“Aquí (Morros Blancos) me dedico a la sastrería, que con el paso del tiempo esto ha sido como terapia para mí, porque de corte y confección yo no sabía nada, y aquí aprendí –dijo F.G.- Eso es lo que me sustenta para poder enviar (dinero) a mi familia”.
Según explican, en la cárcel de Morros Blancos van algunos profesores a capacitar a jóvenes para que puedan cursar lo que es el nivel primario y secundario.
Relaciones entre
reos y policías
Los privados de libertad coinciden que para llevarse bien en el reclusorio, hay que respetar al prójimo, porque caso contrario las rivalidades llevan a peleas fuertes, lo que en ocasiones deriva hasta con heridas de armas punzo cortantes. En cuanto a los policías, señalan que hay algunos que abusan de su autoridad para discriminarlos, incluso maltratarlos física y psicológicamente, sin importar si es hombre, mujer, o una persona de la tercera edad.
MJ: “En cuanto al trato, aquí hay que llevarse bien, porque hay compañeros agresivos, te dicen un montón de cosas y uno debe ser fuerte, no hacer caso a los insultos”.
FG: “Como dice la palabra, aquí cada uno se busca el trato, si uno se porta bien no pasa nada. En mi caso, yo soy cristiano, y con la gracia de Dios aquí conocí al señor, me dedico a la Biblia y a trabajar”.
Alimentación
En cuanto a la alimentación, los reos manifestaron que anteriormente, se daba cierta recriminación con el tema de la comida, pero que actualmente ha mejorado esta situación, pero que esperan que todavía siga mejor. Las damas privadas de libertad señalaron que ellas cocinan su propia comida, con el pre-diario que reciben y los ingresos que generan trabajando, puesto que el alimento de la cárcel de Morros Blancos es solamente para los varones.
Atención médica
Lo que estipula la Ley de Ejecución Penal y Supervisión, es que los reclusos deberían recibir una atención médica mínimamente 2 veces al mes. Pero los privados de libertad manifiestan que “van los que quieren”, y a quienes no les interesa, no aparecen para esas revisiones. Sin embargo destacan que atienden de lunes a viernes, incluso algunos fines de semana.
Inoperancia de autoridades
Tras revelarse este tipo de irregularidades, la docente de la Universidad Privada Domingo Savio (UPDS), Mónica Blacudt cuestionó la inoperancia de algunas autoridades municipales y departamentales del ámbito público y privado, puesto que dejan desprotegidos a las personas que se encuentran privadas de libertad, lo que ocasiona un atropello a sus derechos que tienen.
“Tenemos leyes y autoridades encargadas y entendidas para poder hacer cumplir estos derechos que lógicamente tienen esta población, pero sin embargo las leyes como tal simplemente están para leerlas –Enfatizó Blacudt- Al conocer los casos e injusticias que se cometen dentro de los centros penitenciarios, no son denunciables y si se llegan a denunciar estos casos lamentablemente no se toman acciones”.
Nosotros cuando vemos las noticias o cuando hacemos labor social en la cárcel, o tenemos algún cliente en la cárcel y nos cuentan las cosas negativas que pasan dentro del centro penitenciario y sin poder hacer nada. (eP)